Sex With Me (Albalia) [+18]

Reglas

Hoy me he levantado antes de lo nornal he de admitir que estoy nerviosa por lo de esta noche y apenas he dormido, no he dejado de dar vueltas por toda la cama y tarde más de dos horas en coger el sueño.

Son las 8 de la mañana así que supongo que María no se levantará hasta tarde ya que como no, ayer salió otra vez de fiesta y llegó a las tantas. Decido ponerme a ver una serie en Netflix hasta que se despierte y así poder ver que opina ella de todo esto.

Después de muchos capítulos por fin veo salir a María por el pasillo cob una cara de muerto que no puedo evitar reirme.

--Buenos días, que tal la resaca?-- le dije con una gran sonrisa.

--Mira, mira no me hagas preguntas. Me va a explotar la cabeza.-- balbuceó con cara de no poder más con su vida.

Después de estar un rato riendome de ella y de las cosas que la ocurrieron esa noche vi un gran momento para pedirle opinión sobre lo que me paso ayer en la universidad y lo que puede pasar hoy si decido quedar con Natalia.

--Oye Mari, necesito que me ayudes con una cosa-- le dije mirando a la mesa con algo de vergüenza.

--Dime rubia, para eso estamos-- suspiré y le conté todo lo ocurrido de principio a fin.

--Madre mia Alba que fuerte todo. Haber yo he oido algunas cosas de Lacunza que alomejor te ayudan, ya tú haz lo que veas mejor.

Dicen que Natalia se trae unos rollos muy raros a la hora del sexo y que es muy selectiva con quien decide compartirlo, eso para ti debería ser bueno ya que lleva to pesada contigo desde el día uno-- después de decirme todo esto no pude aguantar más y le comente mi mayor duda.

--Ya Mari pero es que tengo un problema...ella me gusta pero...--Dios que difícil es esto coño.

--Va Alba arranca que es pa hoy-- me dijo impaciente poniendo cara de dormida.

--Es que yo... Todavía soy virgen...--después de decir esto no pude evitar ponerme roja y mirar la cara de María que lo dice todo.

--Tía eso no importa, tu piensa que ella te ha elegido a ti y que lo podéis hablar y ya esta. Si te gusta la chavala y estas agusto pos pa delante y te das un meneo al cuerpo-- su comentario me hizo reir y sentir bastante cómoda.

--Pero...¿y si no soy suficiente para ella?-- pregunté con algo de miedo.

--Pues en ese caso que se joda y ella se lo pierde rubia--rió con ganas pegandome la risa.

--Muchas gracias Mari, ya veré como sale esta noche todo.

Solo quedaba una hora para las 23, me había duchado y peinado el pelo hacia atrás. He decidido ponerme un vestido negro largo apretado con el escote hasta el ombligo "a por todas Alba, hoy vamos con todo" me estaba poniendo los tacones plateados cuando me llega un mensaje

Natalia Lacunza

--En media hora pasa un coche a por ti, pasame la dirección.

Ubicación.--

Como bien dijo a la media hora había un coche negro en la puerta que me llevo a un restaurante a mi parecer bastante caro. Al llegar el conductor muy amablemente ne acompaña dentro a una mesa lejana donde me esperaba Natalia.

Dios mio, va guapisima. Lleva un traje granate con unos zapatos negros de plataforma y el oelo recogido en una coleta. Sin hablar de su maquillaje que destaca por las sombras negras y su eyeliner perfecamente hecho.

--Buenas noches Alba--Mierda me he quedado empenada mirándola.

--Buenas noches Natalia-- digo mientras me siento en la silla.

No decimos nada más y nos ponemos a mirar la carta puedo notar como me mira de arriba a abajo con esa mirada sulla y su estúpida sonrisa.

--¿pasa algo?-- le pregunto levantando la ceja.

--Estas preciosa Alba-- me susurro haciendo que note como me suben los colores.

--Estoy segura de que te esperabas otra cosa cuando te dije de quedar, pero necesito que sepas algunas cosas.-- según acabó la frase ya tenía curiosidad y le dije con la mano que continuase.

--Bien, me imagino que ya has oído como me gusta funcionar, pero hay cosas que se le escapan a los rumores y son algunas reglas-- su cara era totalmente sería y eso me asustaba y me ponía cachonda a partes iguales.

--La primera, voy a cumplir todas y cada una de tus fantasías sexuales-- asenti hacia esto, haber como le digo lo mio...

--La segunda, no le puedes contar a nadie lo que hagamos en la intimidad eso es cosa nuestra--pude ver como se le escapaba una sonrisa después de esa frase lo cual me hizo sonreir.

--la tercera, probaremos todo lo que se nos ocurra solo y repito SOLO si las dos estamos de acuerdo. No te voy a obligar a hacer algo que no quieras.--

--y por último, eres sólo mía. En lo que dure todo esto no podrás estar con nadie más. ¿Te parecen bien? -- cuando acabó me quede un rato pensando sus reglas para ver por donde me podría salir esto.

--Mmm...me parece bien pero una última cosa-- le dije con una pequeña sonrisa.

--Dime-- me dijo devolviendome el gesto.

--¿Qué te parecería si te dijese que soy virgen?-- pregunté con uba sonrisa pícara.

Se relamió los labios y ne miro con una sonrisa torcida.

--Me parece que nos lo vamos a pasar muy bien tu y yo Alba Reche. Por el momento ¿qué te parece si nos vamos yendo?-- dijo apoyando los codos eb la mesa para poner su cabeza.

--Me parece bien señorita Lacunza-- dije mientas se levantaba y ne tendia la mano.

Después de esto salimos del resaurante a un coche rojo que sin duda parecía bien caro.

--¿A donde vamos?-- pregunte con mucha curiosidad.

--A pasar un buen rato señotita Reche.