La Hermana de Carlos

Tiempo.

- I'm a God! – escuchó Ben a lo lejos.

Alertado, este se levantó y se dirigió a la entrada del castillo.

- ¿Qué ocurre? – preguntó a la vez que bajaba las escaleras.

- Oh, aquí estás niño bonito. – mencionó Hades en modo de burla–. ¿Recuerdas lo que te dije sin palabras cuando se derribó la barrera y llegué a Auradon? ¿No? Bueno, te lo recuerdo. Te vigilo, le haces algo a Mal y te mato. – recordó.

Justo en ese instante guardias se acercaron al dios con intención de finalmente sacarlo.

- Tranquilos, tranquilos. Una última cosa y me voy. – apaciguó Hades a la vez que apuntaba al rey–. Agradece que Mal te quiere.

Cumpliendo a su palabra, el dios del infierno se retiró, dejando a un Benjamin bastante confuso.

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Semanas habían pasado desde que Mal dejó Auradon y desde que Hades había ido a enfrentar al rey.

El gran reino comenzaba a notar más la ausencia de Mal con cada día que pasaba y conforme ninguno de sus cercanos otorgaba declaraciones al respecto, todo tipo de teorías estaban siendo creadas por la prensa y el resto de los mortales.

Evie seguía con la esperanza de ver a su amiga volver caminando por el puente con su característica sonrisa; por esta razón, la mano derecha del rey se dirigía todos los días a dicho lugar, dudando de si su amiga aparecería o si ella debía ir a buscarla para arreglar las cosas. Sin embargo, la reina jamás se mostraba y ella jamás se adentraba en la Isla.

En cuanto a Ben, seguía igual. Añoraba a Mal y a los ojos de sus amigos eso era más que obvio, no se concentraba totalmente en el trabajo y cada vez que podía iba al lago encantado, recordando su primera cita con la oji-verde.

Dicen que no podemos evitar la tristeza pero que el sufrimiento sí es opcional. No obstante, ¿qué pasa cuando extrañas algo o a alguien a tal punto de ver fotos y/o vídeos para de esta manera sentirlo cerca, para no olvidar cómo era a su exactitud? ¿Cómo evitamos ese tipo de sufrimiento? Los humanos somos así, nos aferramos a ciertas cosas o personas que sentimos nos hacen bien y al estas terminar o perderlas respectivamente padecemos de un vacío gigante, del cual tenemos la necesidad de cubrirlo de alguna forma.

Los recuerdos es una de esas maneras y eso es lo que le estaba pasando a Ben, acudir al lago u otro lugar importante como los casilleros en la escuela o el campo de Tourney, hacían que él sintiera a Mal a su lado. ¿Está incorrecto hacer aquello? ¿Cuenta como sufrimiento elegido?

En fin, por otro lado tenemos a Uma, quien con sus contactos en la Isla de los Perdidos intentaba localizar a Mal sin mucha suerte. Ninguna de las personas que allá aún viven han visto a la reina.

Jay seguía asimilando la situación, recién se había enterado de todo a causa de que su viaje se retrasó y volvió después de lo planeado.

- Déjame ver si entendí. – pidió Jay a lo que su amiga asintió–. Apareció Sofía quien es hija de Cruella, por ende hermana de Carlos. ¿Voy bien hasta ahí?

- Sí, todo perfecto. – respondió Evie.

- Luego de eso Mal comenzó a actuar raro... – dijo el hijo de Jafar realizando comillas con sus dedos al pronunciar la última palabra.

- Sin comillas. Jamás la había visto así antes. – interrumpió la modista.

- Evie, sí es con comillas. Tú misma me dijiste que Mal aclaró que la trataba así por algo mayor, ¿no te has puesto a pensar que tal vez su proceso de asimilar y aceptar todo esto es más largo que el tuyo o el mío?