Capitulo 19

301 26 3
                                    

Al lunes de la semana entrante William no pudo evitar sentirse acosado mientras iba a su trabajo, por más que intentará quitarse esa carta de la mente no podía. Pero él no era el único que tenía a su mente en estado de alerta, Grell tampoco había tenido mucha paz ese fin de semana, porque ahora que por fin había definido sus sentimientos ( de una forma muy poco ortodoxa y que a los ojos de los demás podría decirse apresurada) venía la parte más difícil...

Declararse a William. El shinigami más frío que alguna vez haya podido existir y que le ha recalcado decenas de veces que no busca una relación seria. Pero, si no quería nada serio ¿ porqué era tan considerado cuando estaban solos? ¿ porqué se encela tanto? ¿ porqué no solo lo usaba y después lo deja tirado? ¿ Porqué...

- ¡ Grell-san! - le sacó de sus pensamientos la joven pelinegra. 

- ¿ Eh? Ah Rosa-chan ¿ qué sucede? 

- Esta sirviendo café en su mano - el pelirojo vio como su mano izquierda inclinaba una cafetera todo el café que caía en vez de aterrizar en la taza que tenía en su mano derecha le caía en la piel. 

- ¡ Ah! ¡ Esta caliente! Me dolió - empezó a soplar su mano de una manera infantil provocando una risa de su compañera. 

- De nuevo estás en otro mundo, ¿ es por William verdad? - le preguntó con una sonrisa un tanto perversa. 

- No, para nada Rosa-chan o Marienne-chan, ¿ cómo te gusta que te llamen? 

- Por favor, dígame Rosa-chan...Hey ahí viene Will - el pelirojo volteó a sus espaldas para ver a el pelinegro que estaba intentando abrir su oficina, ante esto el no pudo evitar ir hacia él para saludarlo como lo hacía siempre. 

- ¡ Will! ¡ buenos días darling! - se le abalanzó como siempre para intentar abrazarlo pero lo más sorpresivo fue que en vez de esquivarlo y caer de cara al piso como siempre, él se dejó abrazar por Grell aunque claro solo fue por unos minutos para después darle un ligero empujón hacia atrás. 

- Deberías dejar de hacerlo, algún día te lastimarás de verdad y no podrás hacer tu trabajo - sin más entró a su oficina. 

El pelirojo no supo como reaccionar ante estas palabras, ¿ William se preocupaba por él? Solo faltaba que llovieran dulces del cielo y que Ronald dejara de coquetear con todas las mujeres que se le cruzaran. Aunque no era el único que se sentía confundido ante esta acción...

- ¿ Pero qué rayos acabó de hacer? - se sentía algo confundido, nunca había dejado que Grell lo abrazara en público pero esta vez por alguna extraña razón sentía que lo necesitaba, tal vez era por la ansiedad que le generaba esa carta que había recibido o que sé yo, pero se tranquilizo un poco después del abrazo. 

- No tengo que pensar en eso, debo empezar con esto-  Con tranquilidad empezó a hojear los reportes colocados en su mesa, sin embargo la calma que había recuperado se esfumó pronto cuando entre los papeles descubrió otro sobre como el de la otra ocasión - Maldición, otra vez esto. 

William: 

¿ Cómo estás? Sabes me rompió un poco el corazón que rompieras mi carta anterior ¡ me costó mucho trabajo hacerla! Pero en fin, no desistiré de mis intenciones y para que veas y creas que voy en serio contigo te he preparado un pequeño presente, espero que sean de tu agrado. Ten un lindo día, te amo. 

Atte. ???? 

Mientras tanto, no a muchos pasos de la oficina del pelinegro iba caminando con sus largos tacones la parca roja para entregarle un reporte que debía haber entregado la semana pasada. Iba concentrado tarareando una canción hasta que...

Amor de una sola nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora