Capitulo 23

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La mañana siguiente se veía increíblemente hermosa aún después de la noche de tormenta que había pasado o al menos así lo consideraba Grell que veía el paisaje por una ventana del departamento de William. 

- Desde aquí se ve hermoso el sol - le dijo al pelinegro que lo observaba desde un sillón.

- Sí, tengo una buena vista - Grell pensaba que se refería a la mañana pero el sol naciente era lo último que estaba viendo, lo que él estaba viendo era la figura de un pelirojo observando maravillado el amanecer como un niño pequeño, en su mirada se veía alegría pero algo de nerviosismo a la vez. ¿ Porqué...

- Bueno, tengo que irme. No puedo llegar a la oficina sin arreglarme dignamente - Grell se dirigió a la puerta con tanta rapidez que ni siquiera se despidió de Will, la razón es que sentía que si pasaba más tiempo con él se le iba a declarar antes de tiempo. Solo necesitaba esperar a la tarde. 

- Ne, igual sé que me saludará como siempre llegando al trabajo

40 MINUTOS DESPUÉS

- ¡Buenos días Will ! - Grell como todas las mañanas se le abalanzó al pelinegro con el fin de darle un abrazo, sin embargo lo esquivó como siempre - ¡ Por favor Will! ¡ Ni siquiera porque no nos vamos a ver durante una semana me das un abrazo! 

- Lo sé, por eso en la semana que no estaré compórtate por favor - le dijo mientras le daba un suave golpe en la cabeza con un libro. 

- Spears-san, no sé si yo pueda hacerme cargo aquí mientras usted se va - Alan dijo con esto con un poco de ansiedad. 

- Estarás bien, solo debes cuidar que Sutcliff no se atrase ¿ de acuerdo? 

- S-sí Spears-san 

- Bien, si me disculpan tengo que atender unos asusntos - William entró a su oficina como de costumbre y empezó a hojear los reportes que tenía en su escritorio. Quería dejar todo en orden antes de ir a la misión que le habían encargado. En eso...

- Maldición, otra vez esto...

William: 

Estoy tan feliz por tu respuesta, amado William. No puedo esperar a que sean las 6:00 p.m para poder verte y de paso aclara algunas cosas sobre ese pelirojo con el que te reuniste ayer en la noche. Hasta entonces, te amo. 

Atte. ????

- Maldición, ya había olvidado lo de esta tarde - William dejó caer su cabeza entre sus manos debido a lo agobiado que estaba, pero era lo único que podía hacer. 

HORA DEL ALMUERZO.( 2:00 p.m) 

Grell estaba cansado no solo por los reportes que había tenido que entregar sino por una pequeña inquietud que le rondaba por la cabeza. 

- Si William va a estar ocupado hoy empacando para irse al mundo humano, ¿ a que hora podré decirle? - tuvo la oportunidad ayer en la noche y no se lo dijo, no le iba poder decir si estaba en el mundo humano, no se lo podía decir ahora porque no le daría tiempo de pensar. Eso significaba... 

- Se lo diré hoy, pero unas horas antes de salir de la jornada, sí eso será lo mejor. Lo sorprenderé dándole una pequeña visita. - Grell se retiró de nuevo a su cubículo con el agua que estaba bebiendo y una estrategia de última hora.  

6:00 p. m 

La hora había llegado y William con mucha resignación dejó sus papeles para ir a la biblioteca. 

- Humphries, cuide estos papeles por mí. 

- Muy bien, pero ¿ a dónde va Spears-san? 

- A la biblioteca - fue lo último que le dijo al castaño y siguió su camino. Abrió la puerta con una llave especial que casi siempre llevaba en su bolsillo y fue a uno de los estantes de a lado. Lo curioso era que aunque la biblioteca es un lugar de difícil acceso no tenía muchos escondites. El silencio reinaba en el lugar, hasta que la puerta se abrió nuevamente... 

Amor de una sola nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora