One-Shots BakuTodo/KatsuShoto [Finalizado]

5.Prostituto

-Lemon
-Un poco de masoquismo

El dibujo todo pixeleado wkdnekdm
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Todoroki como de costumbre esperaba en la esquina de aquel bar que solía transitar casi siempre, esperaba a su cliente como siempre, no sabía como había caido tan bajo como para llegar a ser un prostituto.

Él iba de cama en cama con hombres y mujeres entre 21-28 años de edad, estaba hartandose de esperar, ¡ya llevaba ahí parado como idiota casi una hora! Sacó su celular para cancelar al cliente cuando este llegó, le abrió la puerta del auto y le hizo una seña para que suba él simplemente hizo caso, subió al auto y cerró la puerta para después el rubio empezar a conducir hacia un bosque, a una cabaña donde sólo iba para acostarse con alguien, aunque, esa era la primera vez que recurría a un prostituto ya que él antes tuvo novia pero termino con ella.

Que pena, pero solo para ella.

Miró al bicolor de arriba a abajo le gustaba lo que veía, este llevaba un short que hacía lucir sus piernas, una camiseta blanca y una sudadera roja, el bicolor no iba maquillado apenas se había hechado un brillo de labios con sabor a durazno y ya.

-¿Qué miras tanto? - Dijo en un tono algo frío e incómodo, a nadie le gustaría que te miraran mordiendose el labio con una expresión de pervertido sin fronteras.

-Tsk... cállate. -Dijo algo molesto por el tono de su voz, pensaba que iba a ser diferente pero no, se equivocó.

El bicolor rió levemente y dirijió su vista a la ventana mirando las estrellas, eran hermosas en su opinión.. le ayudaban a relajarse aunque sea un poco, hasta que una maravillosa idea se le cruzó por la mente y claro, no iba a dejar pasar tal oportunidad.

-Oye, ¿cómo te llamas? -Miró al rubio cenizo esperando alguna respuesta.

-Bakugou katsuki, el que te hará gemir toda la noche -Sonrio de lado y miró al bicolor, este estaba levemente sonrojado por lo que le dijo el rubio, y habló nuevamente.

-¿Cuánto tardaremos en llegar a donde sea que vamos?

-Una hora como mínimo, si quieres duerme para que puedas aguantar lo de hoy -dijo con aire coqueto.

-E-esta bien -No supo por qué tartamudeo y se acomodó en el asiento dandolé la espalda, hizo el asiento hacia atrás, se puso en tal posición que resaltaba su cadera, buenas piernas y trasero.

El rubio volvió a mirarlo y se mordió levemente el labio, el menor no estaba para nada mal, se imaginaba como sería escucharlo gemir, agitó su cabeza de lado a lado y se concentró en el camino, debía dejar sus pensamientos pervertidos de lado para no chocar con algún auto.

Shouto aún no se dormía miraba un punto indefinido pensando en todo lo que ha pasado en su vida, sus problemas, sus peleas, en esa fea cicatriz, etc. Básicamente en todo lo malo que le ha pasado, dejó de pensar en ello o sino se deprimiría y se sentiría débil como siempre, aunque no lo era del todo.

Por parte de bakugou el iba concentrado en el camino, el silencio reinaba en ese coche, silencios que el menor estaba acostumbrado desde su niñez.

Su sonrisa a medida que iba creciendo se iba apagando al punto de que pocas veces mostraba una sonrisa verdadera de felicidad, no una de incómodidad o obligatoria que hacía sin muchos ánimos, mientras que su rostro decía una cosa, sus ojos reflejaban otra.

Se sentía asfixiado al ser mirado con asco e indiferencia por la calle, como comentarios al azar invadían por donde quiera que él pasase odiaba a la gente que no entendía su situación y hablaba sin pensar, se odiaba a si mismo por no haber obedecido y estar ahora en mejor vida, con una casa cómoda y no en un departamento de mala muerte, con comida real y no siempre pizza ni comida china porque el dinero no le alcanza ya que tiene que pagar renta, si sólo hubiera escuchado a su padre y no por rabietas de un adolescente se hubiera ido, todo sería completamente mejor.