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Pasaron los días, DongHyuck se estaba preocupado por los moretones notorios en su cuerpo que se veían a simple vista por todas esas veces que Mark lo golpeaba. Aunque ya había pasado eso comenzaron a notarse más que los días recientes cuando Mark lo golpeo.
DongHyuck salió de su casa temprano a comprar maquillaje para tapar los moretones y no se vieran obvio como las marcas en su nuca y clavícula y curitas.
Salió normal como si nada sin importarle si pasaba por la casa de Mark, caminaba mirando al suelo. Extrañaba mucho a Mark, lo admite siempre pasaba ratos con él era su novio por supuesto.
Pero como amar a un cretino como él, siempre estuvo enamorado de él en su escuela. Era su amor platónico, siempre le expreso su cariño preocupándose por él sonriendo le cada vez que lo miraba.
Siempre pensó que era un ángel, un hermoso ángel que cayó en su camino. Creyó en él y lo sigue creyendo en todas sus absurdas palabras de "te amo, nunca te haré daño" que decía.
No puede dejar de recordarlo, está en su mente atormentándolo. Cree DongHyuck estar loco, está escuchando voces en su cabeza como si se sonara la voz de Mark.
– ¡DongHyuck, espera! – Realmente era su Mark o un monstruo atormentándolo.
DongHyuck volteo a ver detrás suyo, era Mark corriendo detrás de él buscándolo. DongHyuck camino más rápido, no podía correr por que le dolía su cuerpo. Mark lo alcanzo y lo abrazo por detrás de él.
– ¡DongHyuck, mi amor! – Dijo el pelinegro reposando su rostro en la espalda de DongHyuck.
DongHyuck se quejó de un dolor, Mark lo estaba abrazando muy fuerte su cuerpo en pasaba a temblar de miedo y dolor.
– ¡Mark suéltame! – Grito el menor sollozando asustado.
Mark se espantó ante la reacción de DongHyuck, estaba asustado por verlo.
– Perdón, me sobrepase esta vez. – Dijo Mark retrocediéndose pasos atrás de DongHyuck para que se tranquilizara.
– Tu siempre te sobre pasas Mark, ¿qué te sucede Mark, no eres ese lindo chico al que yo le di mi amor y me le entregue? – DongHyuck se sentó en la banqueta de la calle, no soportaba más estar parado le dolía todo en él.
Mark miro a DongHyuck triste, estaba consciente de su error al forzarlo esa noche. Pero creerá que está loco si le dice que escucha voces decirle cosas, también pasó por lo mismo que DongHyuck porque lo repetiría.
– Me dejaste moretones, moretones Mark te sobrepasaste como la de más veces, Mark es mejor terminar. – Dijo el menor levantándose del lugar para irse a comprar sus cosas.
– Espera DongHyuck... – Mark tomo el brazo del menor jalándolo hacia él. - prometo cambiar, te lo juro que lo haré ya no te forzare. – Mark tomo el rostro del menor, este sollozo no sabía que contestarle.
– Por favor. – Dijo Mark besando los labios sangrados del menor.
DongHyuck tomo las manos de Mark que estaban en su cabello sollozando.
– Será la última... – Dijo DongHyuck besándolo en repetidas veces, extrañaba aquellos besos y esos toques en su cuerpo, no había pasado ni una semana de lo sucedido con ellos en esa noche.
Mark acompaño a DongHyuck a comprar el maquillaje y las curitas para ocultar los golpes del cuerpo del menor, Mark seria él que curaría a DongHyuck de los golpes que él le hizo.
En cada moretón le daba un beso y miraba a DongHyuck poner una sonrisa por sentirse bien.
Pasaron la tarde juntos y también la noche juntos en la cama abrazados, Mark abrazaba a DongHyuck para protegerlo de sus voces internas, no le haría más daño ahora.
