Epílogo

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Dos meses después...

Estoy nerviosa... Creo que no podré, no sé si pueda hacerlo, Anne está tratando de calmarme, pero es en vano, ¡Ja! Y yo que creía que sería fácil, pero mírenme, estoy hecha un manojo de nervios.

-¡Pero ya mujer, tranquilízate que no es el fin del mundo, no es para tanto!- grita Anne exasperada.

-¡Sí que es para tanto, ¿qué tal que se arrepienta?, ¿qué tal si todo sale mal?... No, no puedo, ¿todavía puedo retractarme? - le pregunto sabiendo que es obvio que no.

-Ya Megan, tranquilízate, respira y céntrate. Dylan no se arrepentirá y todo saldrá bien, así que procura calmarte que me estás poniendo nerviosa.- dice y yo asiento, respiro y trato de calmarme.

Estoy con un hermoso vestido de novia, es divino y sé que a Dylan le encantará. ¿Qué estará haciendo en este momento?.

(Dylan)

Megan, Megan, Megan.... ¿estará tan nerviosa como yo en este momento?

Ashhh espero que no se arrepienta, yo la amo demasiado, no me imagino la vida sin ella, sé que todo saldrá bien, lo presiento.

Me pregunto que estará haciendo Max, hace más de media hora que salió de aquí y no ha vuelto, miro a Ron.

-¿Sabes dónde coños se metió Max? - le pregunto

-Ni idea, lo vi peleando con Victoria hace... Mmm más de una hora, ¿dónde se habrá metido?, porque tampoco sé dónde está Victoria - dijo.

Abrí los ojos como platos y Ron al entender mi mirada preguntó:

-¿Estás pensando lo mismo que yo?.

Asentí

-Sí y espero que no sea lo que creo que es. - dije preocupado

-Pues sigue esperando porque creo que es exactamente lo que crees que es- dice Ron

Joder a Megan no le gustará, y precisamente el día de la boda, luego dicen que nosotros somos los conejos.

-Esto a Megan no le gustará para nada- le digo a Ron

-Tienes razón más vale que los encuentre, ya regreso - dice y sale de la habitación donde me estoy preparando para la boda.

(Ron)

¿Dónde se habrán metido esos dos?... Mmm.

-Heyyyyy Nora- digo y la aludida voltea

-Sí, ¿qué? - pregunta cuando se acerca a mí.

-¿Por casualidad has visto a Max y a Victoria? - le pregunto

-No, es más, estoy buscando a Victoria porque no sé dónde coños se metió - dice y en ese instante se oyen ruidos provenientes del armario del párroco, Nora y yo nos miramos y luego volvemos nuestra vista al armario. Me acerco a la puerta y la abro encontrándome con Victoria y Max todos desordenados, tratando de incorporarse.

Nora se acerca

-¡¿Pero cómo se les ocurre enrollarse en el armario del párroco?! - grita histérica.

-Este... . Emm, que te digo... Es que... - balbucea Victoria saliendo del armario con Max.

-¡Ni es que, ni leches!,¡¿precisamente hoy?!, ¡Controlen la arrechera!,¡Diossss y luego yo soy la promiscua! - dice Nora ofendida y se va. Tras ella la sigue Victoria.

Miro a Max

-Me puedes dar la explicación cuando quieras, habla- le digo, me mira, suspira y finalmente dice.

El odio se demuestra de otra formaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora