Jugando con fuego [Dramione]

Capítulo 6

Draco le soltó las muñecas y colocó las manos en la cintura de Hermione, donde la acarició brevemente con los dedos antes de subir las manos hasta su espalda. Colocando la mano abierta en la parte inferior de la espalda femenina hizo presión haciendo que ella se arqueara un poco, pegándola más contra su cuerpo, para que así pudiera notar en el estado en el que se encontraba. Hermione gimió y le rodeó el cuello con los brazos, colgándose de él. Las manos de Draco se movieron de nuevo, esta vez descendiendo hasta llegar a las nalgas de Hermione, por encima de la tela de su camisón, desde donde la levantó, Hermione sin dudarlo le rodeó la cintura con las piernas.

A ciegas, Draco caminó hasta entrar en su casa y cerró la puerta con la espalda de Hermione. La apoyó contra dicha puerta y la sujetó mejor.

Sujetándola en un abrazo, Draco se dirigió hacia su habitación mientras a ciegas le desabrochaba la bata dejándola tirada a mitad del camino. Descubrió que Hermione no llevaba ningún tipo de ropa interior cuando notó su vientre mojado justo en el sitio en el que ella tenía su sexo presionado contra su cuerpo.

Eso hizo que su excitación aumentara.

Bajó las manos deshaciendo el abrazo y las introdujo por debajo de la fina tela del camisón, acariciando cada parte de su cuerpo fue levantándoselo, dejando a la vista su precioso cuerpo. Draco rompió el beso para quitarle el camisón y aprovechó para verla. Soltando un gruñido la dejó caer en la cama, e inclinándose capturó uno de los pezones erectos de Hermione entre los dientes. Ella gimió de placer arqueándose para él, ofreciéndose.

Mientras devoraba el cuerpo de su vecina, Draco fue quitándose la ropa como un experto. Al separarse para quitarse las últimas prendas, vio como ella lo miraba con ojos lujuriosos, como respiraba con dificultad haciendo que su pecho subiera y bajara... excitándolo más.

Corriendo literalmente se acercó al cajón de su mesita de noche. Sacó una caja de preservativos y volvió al lado de Hermione.

Puso la caja sobre el colchón e hincó las rodillas en la cama.

A pesar de estar terriblemente excitada, Hermione había podido despejar un poco la mente mientras Draco iba a por la caja de los preservativos.

Comenzaba a arrepentirse de eso.

Sería mejor que se fuera.

Comenzó a gatear por la cama para bajarse, pero Draco la cogió por los tobillos y tiró de ella, acercándolo a él. Se inclinó sobre ella.

— Te gusta jugar ¿eh? — susurró juguetón, obviamente no lo había tomado el gesto, como un intento de irse — pues jugaremos...

Introdujo una mano entre la cama y el cuerpo de Hermione y la incorporó haciendo que la espalda de ella quedara pegada a él. Hermione no pudo evitar jadear al sentir la erección de Draco.

Él se inclinó un poco y tras echar el pelo de Hermione sobre uno de sus hombros, comenzó a besarle el cuello, haciendo que ella gimiera y se frotara contra él.

Una de las manos de Draco, comenzó a recorrer el cuerpo de Hermione, acariciándola repetidas veces, deteniéndose al llegar a su sexo. Con un dedo la acarició ligeramente. Cuando Hermione inconscientemente separó las piernas, Draco dejó que su manos se adentrara más en su cálido y húmedo sexo.

— Draco... — gimió Hermione cuando él presionó su mano contra su sexo, acariciándola. Introdujo un par de dedos en ella y los movió mientras que le acariciaba el clítoris — ¡Dios Draco! ¡Oh dios...! Me vo... — jadeaba mientras se movía.

— Si, cariño, eso es...

Ante las palabras de Draco, Hermione no pudo evitar alcanzar el clímax. Intentando normalizar su respiración Hermione se dejó caer hacía atrás y se apoyó en Draco. Las piernas le temblaban.

Draco la ayudó a tumbarse bien sobre la cama.

La cargó en sus brazos y la colocó en el centro de la cama.

Empezó a depositar pequeños besos sobre el tembloroso cuerpo de Hermione, empezando por su cara... siguiendo por su mandíbula, cuello, bajando hasta sus senos...

Volvió a ascender. La besó en los labios posesivamente. Mientras el beso se intensificaba, Draco introdujo su mano entre las piernas de Hermione. La acarició... cada vez estaba más húmeda y eso lo enloquecía..., le separó las piernas y se colocó entre ellas.

Sujetándola por las caderas entró en ella de una profunda embestida. Ambos soltaron un grito ante el impacto. Hermione gimió y dejó de respirar inconscientemente.

Se dio cuenta de que no respiraba cuando Draco comenzó a moverse en su interior con un ritmo profundo y lento.

Hermione clavó las uñas en los hombros de Draco y rodeó su cintura con las piernas, dándole mejor acceso. El ritmo iba incrementando por momentos, cada vez las embestidas eran más rápidas y profundas.

Ella gimió arqueando su espalda cuando sus paredes vaginales comenzaron a contraerse, anunciando la llegada de su orgasmo. Draco aceleró aun más, una película de sudor cubría su frente y ella se aferró más a él, mientras se movía siguiendo su ritmo.

Segundos después lo notó tensarse en su interior. Gimió y contrajo su sexo haciéndolo perder el control. Ambos gritaron cuando sus cuerpos alcanzaron juntos el orgasmo.

Y él se dejó caer sobre ella, abrazándola.