Capítulo 9

1.9K 140 22
                                    


Draco sonreía divertido. Eso había estado bien. Muy bien y muy gracioso. Apenas podía contener la risa.

— ¡No te rías! — exclamó Hermione.

— Deberías haberte visto la cara.

— No ha sido divertido.

— Oh, ya lo creo que sí.

— ¿Por qué has hecho eso?

— Por la misma razón por la que lo ibas a hacer tú: Para joderte un poco.

— ¿Perdona?

— ¿Por qué si no ibas a perseguirme haciéndote pasar por mi novia? No me conoces, no te conozco. Llegas aquí y me besas sin saber siquiera quien eres, me llamas con adjetivos cariños solo cuando hay gente. Después pasas de mí como si no me conocieras, eso se llama: joder a alguien. Y en este caso ese alguien soy yo. Además está el asunto de que te has acostado conmigo y luego has desaparecido como si nada.

— ¡Te equivocas! Claro que te conozco — contestó evitando el segundo tema.

— ¿Si? A ver... te escucho.

— No tengo por qué darte explicaciones.

— Yo creo que sí. Al fin y al cabo soy yo al que intentas fastidiarle la vida.

— Tú te lo has buscado.

— ¿Ah, sí? ¿Y cómo fue eso?

— Le jodiste el corazón a mi amiga — escupió ella.

¿Qué? ¿De qué hablaba?

— Oh... llegó el ángel vengativo — ella hizo una mueca — ¿Y se puede saber quién es esa amiga que está tan destrozada a mi causa?

— Te he dicho que no tengo por qué darte explicaciones.

— Y yo te he dicho que me la merezco — dijo Draco cada vez mas furioso cogiéndola por las muñecas y pegándola a él.

— ¡Suéltame! — él no le hizo caso, pero si le soltó las muñecas y la agarró por los brazos.

— Dímelo Draco...

Ella tiró de sus brazos y se soltó enfadada ¿Quién se había creído el energúmeno ese? Estaba enfadada y... excitada. Quería besarlo para callarlo y que lo dejara en paz, pero en cambio dio pasos ciegos hacía detrás intentando respirar para calmarse.

— Mira Draco — comenzó ella — no tengo por qué darte explicaciones. De hecho no te las voy a dar. Pero ten por sentado que no te voy a dejar así porque así.

— ¿Me vas a perseguir? — preguntó divertido. Todo el enfado se había ido.

— Podría ser — contestó seria. Él rió.

— Bien — rió Draco — seremos tú y yo. Porque no vas a ser la única que juegue.

— Te voy a espantar a todas las tías — anunció ella.

— Mientras te tenga a ti en mi cama no me importa.

— ¡Yo no estaré en tu cama! — exclamó ella indignada.

— Ya veremos...

— Calla.

Él se inclinó hacía ella y rozó sus labios contra los de ella pillándola desprevenida.

— Estás jugando con fuego, Draco.

— Me gusta quemarme, cariño. Tú empezaste el juego. Me gustas y quien ríe el último ríe mejor. Esto solo acaba de empezar.

Jugando con fuego [Dramione]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora