Consorte.

"El destino en tus manos."

"No existen las casualidades, solo el destino. -"

Disfruten.

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Cuauhtémoc caminaba con paso firme por los amplios pasillos de Serei Den; seguido de cerca por Julieta y Diego, se dirigía hacía una de las reuniones mensuales con el Consejo y representantes de la Cour. Esas asambleas; habían sido instauradas por Aristóteles, en pro de democratizar la toma de decisiones y dispersar el costo político de las mismas, aunque también eran un riesgo.

Está en especial era importante; pues coincidía con el reporte trimestral de resultados en el comportamiento general del Imperio, esas reuniones siempre terminaban en acaloradas discusiones, que él por supuesto no estaba dispuesto a perder bajo ningún motivo. Llegó hasta las puertas de la gran sala donde se llevarían a cabo las pláticas, los guardias imperiales hicieron una reverencia al verlo, antes de anunciarlo y abrirle las pesadas puertas de madera.

Al entrar; vio los rostros de sus aliados, como de sus enemigos, así como de aquellos que solo eran oportunistas políticos, camino rodeando la gran mesa, hasta sentarse en el asiento que le correspondía como Emperador, un lugar que antes ocupó su Ari. - Buenos días a todos, pueden sentarse, vamos a iniciar está reunión. - Exclamó con voz firme, sin lugar a réplica o duda alguna, todos ahí, obedecieron.

-Tiene la palabra Darius Reyhart; Princeps de la casa fundadora Reyhart, por favor ¿dinos que quieres tratar el día de hoy? - Fijó sus ojos sobre aquel despreciable hombre, esperando la barbaridad en turno, aliso tranquilamente su túnica color negro y ladeo su cabeza con interés, escuchando con paciencia. Aunque por su cabeza ya rondaba algo de lo que podría suceder, el dinero siempre era un tema recurrente.

-Muchas gracias su Sagrada Majestad Imperial; seré directo, miembros de la Cour, así como del Consejo de Familias, fuimos informados de la reciente entrada de 3.8 billones de coronas al tesoro del imperio, proveniente de las arcas del sultanato de Darud, como de las intenciones de su ilustrísima de dar cobijo a todos los refugiados de esa nación. - De inmediato fue capaz de vislumbrar los planes de aquel grupo, pero lo dejo continuar.

-Consideramos dadas las circunstancias generales del Imperio; así como de las regiones que lo conforman, que por lo menos un 50% debe ser repartido entre los miembros del Consejo y de la Cour, para ayudar a paliar nuestra precaria situación económica, pues es de su conocimiento que su plan fiscal, cargo de más impuestos a muchos de nosotros. - Cuauhtémoc sintió a Diego y Julieta removerse de manera nerviosa, debido al cambio de temperatura a su alrededor, era su furia fría proyectándose.

-Para tu información Darius; para conocimiento de todos realmente, no fueron 3.8 billones de coronas, fueron 7.4 billones, lo que el Sultanato transfirió a nuestras arcas, pero antes de que den saltos de gusto, debo darles unas pequeñas clases de cómo funciona el mundo. - Movió su mano derecha hacia Diego, que respondió entregando una serie de documentos sellados, mismos que comenzó a leer con cuidado.

-Rodrigo OrVero; nuestro ministro de hacienda, se tomó la molestia de entregarme estos documentos horas antes de esta reunión, en ellos se analiza en comportamiento de los ingresos y egresos de las arcas imperiales, así como las contribuciones obligatorias por familia. - Cuauhtémoc disperso copias de los documentos con solo girar su mano y los hizo llegar flotando a cada uno de los presentes.

Espero paciente a que todos y cada uno de ellos hojeara con cuidado su contenido, para que se familiarizaran con lo que tenía que decir. - Como pueden ver en ese reporte sintetizado; del que les puedo hacer llegar una copia completa si así lo desean, pueden ver que los ingresos de las 7 familias han aumentado de manera sustancial desde el inicio de la guerra. - Cuauhtémoc fijó su mirada sobre la de sus oponentes buscando algún tipo de reacción, pero no encontró ninguna.