"Los vientos de la guerra Parte 1."

982 77 92
                                    

"Bienaventurados sean aquellos que danzaran al borde de una espada. -"

Disfruten.

°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°

El viento soplaba fuerte en las llanuras Jatze, la parte más alejada de Orzai, colindante con las fronteras de la devastada Vania; el aroma a podredumbre y muerte se acercaba cada vez más a cada minuto que pasaba. Alexei Rey de Orzai, se encontraba con una extraña sensación de tensión y tranquilidad, por un lado, sabía que la guerra que ahí se llevaría a cabo sería desastrosa para él y su nación.

Por el otro; confiaba en que su pueblo estaría a salvo en Tule, con el gran plan de evacuación ofrecido por su Sagrada Majestad Imperial Cuauhtémoc Córcega D'von, ahora solo debía confiar en que podía frenar la avanzada de ese ejército de muertos. - ¿Nervioso su alteza? Puede retirarse en cualquier momento que desee, mi hermano dispuso trasladores en caso de que se requiera, no es realmente necesario que este aquí. - La voz tranquila y amable del general José López D'von rompió su hilo pensamientos, haciendo que le prestara atención.

-Se que mi presencia no es necesaria su excelencia; pero no me puedo ir tranquilamente y dejar que usted luche nuestras guerras, sería una falta de respeto, mis hombres y yo nos quedaremos a apoyar en todo lo que sea posible. Suficiente hacen ya con proveernos un refugio, estaremos eternamente en deuda con ustedes, en especial con su hermano. - Respondió con una inclinación de cabeza para mostrar el respeto que le tenía.

-Su excelencia; Alteza, me disculpo por la intromisión, pero el ejército de los muertos ha sido por fin avistado a unos 10 kilómetros al oriente de la fortaleza, nuestros exploradores informan que tras este un contingente de exterminadores de Rhyle cabalgan, pero no parece haber nada más, es posible que nos enfrentemos a magia de lanzamiento de alto nivel. - Alexei rápidamente se puso en alerta mirando fijamente a su acompañante.

-Bien; alista al contingente de arquería, informa de la situación a todos los mandos, que se preparen para el encuentro, el General López D'von estará de observando, pero tomara el liderazgo en caso de que sea necesario, desplieguen a la Caballería y a la Infantería. Es momento de que aprendan que Orzai no es su patio de juego. - Los altos mando de Orzai asintieron retirándose inmediatamente de la habitación junto a su Rey, mientras Jose se quedó admirando el aparente infinito de esa pradera.

A Pepe no le tomó mucho tiempo darse cuenta de la inevitable llegada de sus enemigos; pues vislumbro una enorme horda en el horizonte, que avanzaba lenta pero segura hacia la fortaleza fronteriza de Jatze. Noto de inmediato el extraño olor a podredumbre que el viento atraía hacía él, era un hedor bastante particular, pues no era a carne en descomposición, era algo con una nota más suave y dulce, pero igualmente desagradable.

Avanzó hasta el puesto de observación, donde los generales de Orzai planeaban la defensa de su frontera nacional, él se quedó callado, analizando en silencio los planes de cada uno de ellos y creando en su cabeza medidas de contingencia para cada uno de dichos planes. - General D'von ¿tiene alguna sugerencia? - Preguntó el general de más alto rango de su nación aliada, un hombre viejo de aspecto cansado pero firme.

-Considero un desperdicio de recursos usar arqueros contra los muertos; a menos que cada flecha esté encantada, no harán más que rasguños a las fuerzas de nuestro enemigo, la magia oscura de super nivel usada por Vikar, debe haber elevado su resistencia a ataques de rango como las flechas. - El puesto quedó en silencio de manera momentánea, pues todos analizaban sus palabras.

-Si me permiten una sugerencia; es mejor usar infantería contra estos enemigos en particular, perdieron su capacidad de usar flechas o de cabalgar, solo poseen los instintos básicos de lucha cuerpo a cuerpo o combate básico con espada. Considero que lo más prudente es guardar esas fuerzas para lo que viene tras esa horda, pues esto solo es una fachada. - El resto de sus colegas asintieron, largando órdenes a todos los mandos para que prepararan para la batalla.

Consorte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora