10- DOBLE PLAN

8 3 0
                                    

                            MICHAEL

–La persona infectada es tu amiga Fernanda.– me dice ella en tono de lástima.
–Me sorprende saber que no fue Axel o el estúpido de Michelle.– río bajo.
–¿No te sientes mal por ella?.– me pregunta con ligero tono de asombro.
–Todos mueren tarde o temprano, además no la conozco demasiado. Siento lástima por ella pero no como para llorar.– digo de manera indiferente. Ella era de una clase diferente a la mía.
–Wow, que frío... Es tu decisión.–
–Y... ¿Por qué nos tienes aquí si la que está infectada es ella?–
–Porque tú y tus amigos pasaron demasiado tiempo con ella. Puede que estén infectados también.–
–¿Y eso que importa?.–
–Solo queremos esperar para ver si alguno de ustedes presenta señales de estar infectado. Pero los vamos a dejar despedirse de ella.–

                              AXEL

Horas después de que nos capturaran, Jairo, Leslie, Michelle, Nayem, Kat y yo despertamos en una celda; todos estamos atados a una silla con las manos detrás del respaldo.

La celda esta prácticamente vacía pues solo tiene las seis sillas, pero afuera está un guardia de pie al lado de la puerta.

–¡Hey!, ¡oye tú, guardia!.– grito tratando de llamar su atención.
–¿Qué quieres?.– me pregunta el guardia sin siquiera girarse a verme.
–¿Por qué estamos aquí?.– pregunto en voz un poco alta para que me escuche bien.
–Los tenemos aquí por precaución, uno de ustedes está infectado.–

Todos nos quedamos impactados al escuchar eso; permanecemos en silencio aproximadamente cinco minutos intercambiando miradas.
Así que para eso nos revisaban...
De pronto, llega una mujer rubia con su cabello recogido en una cola de caballo y un cubre bocas y se detiene frente a la puerta.

–Abre la puerta y desatalos, es hora de que la vean.– ella ordena al guardia y el guardia inmediatamente saca la llave de la puerta.
Cuando nos desata, tenemos la oportunidad de correr y tratar de escapar, al fin y al cabo solo hay un guardia. Pero ninguno de nosotros intenta nada.

–Acompañenme, por favor.– nos pide la mujer en tono amable y sale de la celda.

Llegamos a otro cuarto igual pero oscuro. Al fondo se puede distinguir a alguien atado de la misma manera que nosotros a la silla. Al fijarme bien quién es me doy cuenta. Es Fer.
–¿Por qué la tienen aquí sola?.– le pregunto a la mujer.
–Tienen treinta minutos para despedirse de ella, después los dejaremos irse.– ella ignora mi pregunta.
–¡¿Pero por qué la tienen aquí?! ¡¿quién mierda eres tú para decirnos que hacer?!.– pregunto fastidiado. Ya me cansé de preguntar y no recibir respuestas.
–Yo soy Amanda, y podría decirse que soy la médico del lugar. ¡Así que cállate y obedece lo que yo diga!.– me grita abriendo la puerta de la celda– Niña, tienes visita... Los dejaré solos.– ella simplemente se da la vuelta– Todos tienen el mismo problema de autoridad...– susurra mientras se va.

Al entrar a la celda, Fer está cabizbaja; pero su blusa, que antes era blanca, ahora está de un color rojo por la sangre.
–¡Fer!, ¡¿qué te pasó?!.– Nayem, su primo, corre hacia ella. Fer levanta la cabeza y logro ver que tiene unos pañuelos completamente rojos en su nariz.
–¡No te me acerques!.– le grita Fer a Nayem– Estoy... Estoy infectada...– ella comienza a llorar volviendo a bajar la cabeza.
En ese momento, la puerta de la celda se abre de nuevo y entra mi hermano, que fue traído por un guardia. Después, el guardia cierra la celda y se marcha.
–Me sorprende que sigas viva.– Michael sonríe leve. Realmente a veces puede llegar a ser un fastidio cuando dice cosas que no debería.
–A mi también me da gusto verte.– le dice Fer en tono de ofendida.
–¿Pero... Cómo te infectaste? ¿cuando te mordieron?.– Nayem pregunta con tono triste, dejando salir unas cuantas lágrimas.
–No me mordieron... Antes de escapar del centro comercial un zombie me derribó y se puso sobre mi tratando de morderme. Tú lo mataste pero su sangre cayó sobre toda mi cara y tragué un poco por accidente...– ella responde en el mismo tono.
–Entrar en ese centro comercial fue un error...– digo tratando de evitar que se note el nudo que siento en la garganta– Necesitamos un plan para salir de aquí.–
–Yo no me quiero ir, ¡aquí es perfecto!.– comenta mi hermano y solo lo veo fijamente, tratando de ver si fue una broma.
–No puedes quedarte aquí, no te voy a dejar.– le digo en tono serio. Va a venir conmigo lo quiera o no. No importa si tengo que sacarlo a rastras, va a venir. Es la última familia que me queda–¡¿Quieres quedarte en dónde literalmente nos secuestraron con sacos en la cabeza y todo?!.– él solo rueda los ojos y ve para otro lado.
–¿Por qué aún no te conviertes en zombie? Hace más de un día que pasó eso.– pregunta Kat dejando de lado el comentario de Mica.
–Amanda cree que el virus zombie actúa a su velocidad normal por las mordidas. Que es cuando el virus entra por las venas y se esparce por el cuerpo al llegar al corazón.– responde fer– Pero como yo lo comí, piensa que está tardando más en actuar el virus porque falta que mi cuerpo lo digiera y asimile igual que como hace con la comida. Así que mi cuerpo ya está absorbiendo la sangre, y con ella, el virus.– termina de explicar.

      Pasamos el tiempo que queda planeando. Al final hicimos dos planes. Uno por si Fer consigue seguir viva para el momento de escapar y otro por si Fer no consigue sobrevivir...

      Después de que los guardias nos sacaran de la celda, nos dejan volver a nuestras casas por qué la revisión que nos hicieron mientras dormíamos dió negativo, ninguno está infectado.

Regresamos a la casa y esperamos al día siguiente para poner nuestro plan en acción.

CRASH WORLD - Parte 1: SIN RETORNO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora