19- HOPE

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                              LUCY

Llevamos aproximadamente media hora siguiendo al auto frente a nosotros a distancia, tratando de que no nos descubra pero realmente me parece algo tonto que no nos vea en medio de la carretera a plena luz del día.
Todos estamos atentos viendo por el parabrisas por si el auto hace alguna cosa diferente, cambia de rumbo, vemos a alguien o cualquier cosa.

–Oigan, ¿por qué simplemente no los alcanzamos y nos presentamos?.–pregunta Leslie.
–Yo realmente no creo que sea una buena idea... Primero hay que ver a dónde llegan y después pensar que haremos...–responde Axel sin perder de vista el auto azúl, igual que todos.
–Estoy de acuerdo con Axel. Yo tampoco confío en nadie ahora, nunca se sabe que clase de personas pueden ser ahora sin leyes.–comenta Jairo.
Después de pasar una semana con ellos conseguí aprenderme sus nombres pues estamos juntos todo el día. Al inicio me incomodaba estar con todos, pero al menos ya me llevo bien con Leslie pues es más fácil tratarla. Con Kat es un poco más complicada de tratar pero aún así nos llevamos bien.
–Eso mismo, la verdad es sospechoso que llevemos tanto tiempo detrás y no hayan hecho nada...–comento viendo por el parabrisas sentada en el asiento del copiloto.
–Simplemente hay que esperar a que se detengan o lleguen a su destino.–Axel se sienta en un lugar donde puede ver el auto, en un pequeño taburete que usamos de silla extra.
Unos minutos después, escuchamos que el auto suena la bocina sin detenerse y enciende sus luces traseras, reduciendo la velocidad. Axel se pone de pie alerta mientras el auto deja que lo alcancemos poco a poco, hasta que se posiciona al lado izquierdo del camper y su ventana queda frente a la de Michael.
La ventana del auto baja y logramos ver a un chico de pelo negro, un poco moreno que nos sonríe. El saca su brazo por la ventana y hace el ademán de girar la perilla para bajar la ventana.
–Eh... Axel, ¿qué hago?.–Michael observa fijamente al sujeto que viene de copiloto; al conductor no logro verlo.
–Bajala. Escuchemos que tiene que decir.–ordena Axel en tono decidido y su hermano suelta su brazo izquierdo del volante para después girar la perilla y bajar la ventana.

El chico gira su cabeza para hablar con la persona que conduce– ¿Lo ves? te dije que no eran asesinos...–él vuelve a girar a vernos– ¿Están perdidos? ¿o hay una razón en específico para que estén siguiéndonos?. Llevan mucho rato detrás nuestro.–él vuelve a sonreír.
–La verdadera pregunta es: ¿Por qué no habían hablado con nosotros antes?.–pregunta Michael prestándole atención a él y no al camino.
–Pues... Estamos de acuerdo que hoy en día no es muy seguro hablar con alguien que encuentras en la calle, ¿no es verdad?.–el cabello del chico es agitado por el viento–Como sea. Nosotros vamos a una comunidad cerca... Les ofrecería ir pero veo que tienen una casa mejor que la nuestra.–le da un vistazo al camper– pero aún así nos pueden seguir y ver que les parece nuestro lugar.–
Axel se acerca a la ventana con una sonrisa– Realmente llevamos mucho tiempo buscando un lugar donde quedarnos. ¿Su refugio queda lejos?.–
Axel habla con el sujeto a través de la ventana.
–Axel... No creo que sea una buena idea...–comenta Nayem pero Axel solo pone un dedo en sus labios indicándole que no hable.
–Pues queda a un par de kilómetros aproximadamente... Vinimos en busca de provisiones a la otra ciudad.–el voltea a hablar con la persona que conduce y hablan por unos segundos. No alcanzamos a escuchar que dicen– Bueno, podemos... Darles un voto de confianza, costó mucho convencerla.–señala al conductor, imagino que es una chica– Podemos llevarlos, ahí es seguro y somos pocos los que vivimos ahí, nos vendría bien personas extra.–comenta el chico y mete la cabeza de regreso al auto– Sigannos.–su auto acelera un poco la velocidad y nos adelanta, colocándose frente a nosotros.
–Perfecto. Mica, no te separes mucho de ellos.–Axel se sienta en el sofá.
–¿Cómo puedes estar tan seguro de esto?. Desconfiaste de la Hermandad del Acero pero solo porque un sujeto es amigable y sonríe ya es de fiar, ¿no?.–comenta Michael– ¿Cómo puedes estar tan tranquilo?.–
–Cometí un error en el pasado con la Hermandad del Acero, pero ya no volverá a pasar. También les daré un voto de confianza. Y si ustedes no quieren quedarse o no se sienten cómodos, nos iremos, ¿okay?. No crean que no me preocupa, al contrario.–
Axel explica en tono tranquilo, demasiado para una decisión tan importante–De igual manera... Prepárense para lo que sea...–
–Bueno... Ese comentario no es nada alentador.–suspiro y veo fijamente el auto más de cerca. Ahora logro ver la silueta del conductor y noto su cabello largo.

CRASH WORLD - Parte 1: SIN RETORNO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora