El Novio Prometido

Capitulo 26 El plan

Entré sin tocar la puerta y ella se encontraba sentada en su cama con su celular, pero en cuanto me vio lo soltó y se dirigió hacia mí.

-¿Había pijamada de primas y nadie me había dicho?- dijo ella con una sonrisa pero está desapareció en cuanto me vio sollozar y algunas lágrimas cayeron de mi rostro- ¿Que pasa Sabrina? ¿Que te hicieron?-

- Fue Daniel, él...-

Pasaron los minutos y ambas nos acostamos en la cama mientras yo le contaba con detalles todo lo que pasó.

- Ese Anthonio es un maldito desgraciado, tiene tan ilusionada a Mary pero mira como es contigo- dijo Melissa.

- Y no solo eso, el está arruinando por completo mi relación con Daniel, él nunca me había hablado así, y todo por el estúpido conflicto entre los dos-

- Si algo tienes que hacer para que Daniel se arrepienta de hacerte llorar te lo diré yo en este momento y te ayudaré primita, ya verás que se va a arrepentir-

-¿Que planeas Melissa?-

- Paso #1 Vestir sexy, paso #2 iremos de compras, para nada exactamente necesario, solo es salir y volver muy tarde, ahh y recuerda no hablarle, tienes que hacer que se de cuenta que te dolió y que nadie hace sufrir a un Lawrence-

- Esta bien ¿y cuál es el paso tres?-

- el paso #3 es que aunque lo perdones, no darle sexo por un buen tiempo, hasta verlo suplicar por tener tu calor otra ves, tienes que provocarlo pero luego no dejar que el te toque, digo si puedes aguantar, a ti también te dan ganas-

- Tienes una mente macabra prima -

Ambas nos reímos y decidimos hacer ese plan mañana temprano, pero ahora hay que descansar.

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Desperté y vi una caja puesta en mis piernas, era una caja de regalo tamaño normal, (debe ser de Daniel, seguro está disculpándose). Tomé la caja y la abrí, en ella vi un sexy vestido deportivo con la parte inferior en forma de mani-pantalon, esto es corto y sexy, debe ser de Melissa y no de él, me levanté y vi en la mesita una nota de Melissa diciéndome lo del vestido y que me soltara el cabello, (que triste que no haya sido Daniel, ahora tendré que seguir con el plan).

Me bañé y vestí, peine mi cabello lo más lacio posible y me puse un poco de maquillaje, según Melissa después del desayuno las cuatro hiríamos de compras así que lo más probable es que ella esté convenciendo a las demás.

Salí de la habitación y me dirigí a las escaleras, desde lejos vi que ya todos están desayunando, pero la silla que siempre ocupo junto a Daniel está ocupada por Melissa y tengo que sentarme justo al frente de él por obligación.

- Buenos días - dije sentándome y sirviendo mi desayuno.

Algunos respondieron mis buenos días y otros solo sonrieron y continuaron comiendo, pero alguien en específico me miraba con cara de sorpresa y un brillo en los ojos que reconocería al instante de quién se trata.

Daniel sigue y sigue mirándome pero yo trato de no verlo el mayor tiempo posible, en cambio Melissa mencionó lo de que saldremos y volveremos en la tarde, eso a nadie le sorprendió pues desde que me casé no hemos vuelto a pasar un tiempo cálido de primas como lo hacemos desde la niñez.

El desayuno acabó y yo me dispuse a ayudar a las sirvientas a recoger la mesa.

- Sabrina podemos hablar - dijo Daniel, quisiera abrazarlo pero me la debe y la verdad estoy disfrutando darle un poco de sufrimiento.

- No - le respondí a secas.

- Se que estás enojada pero dime dónde dormiste, me quedé preocupado-

- Dormí con Melissa- dije sin mirarlo y me dirigí a mí habitación antes de que el entre y no pueda salir más.

Tome mi bolso y dinero en efectivo, también tomé mi celular y salí de la habitación rumbo a encontrarme con las chicas y pasar una tarde solo para nosotras con el fin de traer algo sexy que vestir para la cena de esta noche y matar de celos a mí Dani.

Bajé las escaleras y encontré a Daniel con las chicas, caminé hacia ellos y me paré junto a Melissa.

- Sabrina, Daniel irá con nosotras orden de la abuela, pero también irá Anthonio, Marcos y Michael, será una cita todos juntos- dice Melissa.

Ahora sí ya me jodi, el plan se fue a la verga de un perro.

- Pues vamos, el chófer me dió las llaves del minibús dónde si cabemos todos- dice Daniel.

Esto será muy extraño.