Capítulo 14 Completamente suya

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Daniel entró su miembro en mi por primera vez, ¿Que como se siente?... Pues doloroso, muy doloroso, pero el es tan paciente conmigo que lo hizo de una forma delicada y pasional que veinte minutos después yo seguía temblando debajo de el mientras disfrutaba sus embestidas. El dolor se convirtió en placer, me estaba entregando completamente a el, le estoy entregando lo mas preciado que tengo y pude ver en su rostro que lo estaba disfrutando tanto como yo, sus besos y caricias me estaban volviendo loca y la intensidad de sus embestidas aumentaban, mientras besaba mi cuello y sus manos tocaban cada parte de mi cuerpo, sentí como los espasmos recorrían mi cuerpo estaba cerca de llegar a mi primer orgasmo.

- haaa Dani me... me haa me vengo-

Cerré los ojos y Daniel me puso la mano en la cara para que lo mirara.

-No cierres los ojos preciosa, quiero verte mientras te corres- me dijo con la voz ronca.

Lo mire y el continuó con las embestidas hasta que juntos llegamos al primer orgasmo.

No podía dejar de mirarlo, su respiración agitada, sus labios rojos y sus ojos de un color azul profundo y oscuro, se ve tan sexy, a pesar de estar despeinado.

Daniel se acostó a mi lado y me abrazo, nuestras respiraciones estan agitadas y nuestros cuerpos sudorosos.

Sin darme cuenta me dormí por estar tan cansada.

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Cuando despierto en la mañana, no puedo evitar sonreir, dormí recostada del pecho de Daniel mientras que el sostenía mi cintura para apegarme más a el, nuestros cuerpos desnudos no se alejaron ni un segundo en toda la noche.

Se ve tan lindo cuando duerme.

Toqué su pecho suavemente mientras depositada pequeños besos en el, y me sonrojo un poco al recordar lo de anoche.

-Intentas violarme-

Me asusté al oír al recién despierto Daniel, lo miré y aún tenia los ojos cerrados, me senté en la cama y toqué mi cara de la vergüenza.

Yo no estaba haciendo nada malo ¿o si?

-yo no estaba haciendo tal cosa- dije.

-Que mal, a mi me hubiera gustado que lo hicieras-

No pude evitar sonreír, este hombre esta loco.

-Me iré a bañar- dije levantandome.

-Y lo dices para que te acompañe-

-Noooo- dije riendo un poco.

Cuando me paro de la cama me doy cuenta de que estoy desnuda, así que busco algo con el cual cubrirme.

-Lindo trasero- dijo Dani, yo me espanté y me gire frente a el.

-Mejor callate y pasame esa sabana-

-uuuhhh tu frente es aun mejor-

No pude evitar sonrojarme, este hombre sabe como hacer de mi un tomate andante.

En una esquina de la cama vi la camisa que Daniel tenia puesta ayer, fui hasta donde ella y me la puse.

-Se te ve mejor a ti que a mi-

-¡Dani! Deja de estar mirándome todo el tiempo-

-¿Quieres que ya no te mire?-

-Si por favor-

-Pues esta bien-

Lo vi levantarse y caminar hacía mi, su cuerpo esta completamente desnudo así que por puro instinto desvíe la mirada hacía otro lado que no fuera el.

-Mirame-

No lo hice, considerando que su sexy cuerpo me hace sonrojar cuando lo veo.

-Mirame- volvió a decir.

Esta vez lo hice, pero lo miré directamente a los ojos.

-Yo no te miraré mas, porque tu me lo pediste-

-¿ajá?-

- Haré algo mejor que eso-

Daniel me tomó por la cintura y me beso de una manera tan pasional, yo lo abracé mientras sentía su cuerpo desnudo pegado al mio.

Daniel levantó la camisa que traigo puesta y comenzó a acariciar mi trasero y a apretarlo con fuerza para pegarme más a él haciendo que yo gimiera.

-Aah Dani-

Daniel quito el cabello que ocultaba mi cuello para luego besarlo, su respiración se hacía mas notoria mientras sus labios no dejaban mi cuerpo ni un segundo, el volvió a besar mis labios pero lo dejo de hacer para lo que al parecer iba a decir con tanta urgencia .

-Eres mía Sabrina, completamente mía-.

El Novio PrometidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora