Luego de degustar nuestros postres, compramos algunos para llevar y volvimos al hotel, cuando entramos fui directamente a el baño, desde que llegue he querido probar la tina con agua caliente y espumas, (que delicia).
Preparé el baño y fui sacando de la maleta la ropa que me pondría después, luego de tener mi pijama lista sobre la cama, me desnude y me coloqué la toalla para dirigirme al baño, cuando entro me encuentro nada más y nada menos que a Daniel en la tina.
-¿Que haces? esa es MI tina caliente-
-Pensé que lo preparaste para que me bañara-
-Claro que no, agh me bañaré luego-
Estuve a punto de salir pero Daniel me detuvo.
-Tengo una mejor idea, bañemosno juntos- propuso.
Sonreí.
-Esta bien, sierra tus ojos que voy a entrar-
Daniel me miró mal.
-¿Enserio mujer?-
Me encogí de hombros y él se giró.
Cuando entre el agua aún está tibia por lo que respire profundo y me relaje por unos minutos.
-¿amor?- me llamo Daniel.
-Si Dani-
-Ammm, no se... es que... agh ven aquí- esto último lo dijo con su tono de voz ronca y sensual.
Este hombre me va a llevar al cielo o al manicomio.
Daniel me atrajo hacía el y me besó, nuestros cuerpo desnudos están pegados, me senté en su regazo y continúe besandolo dulcemente hasta que ese beso fue creciendo más y más.
Luego de unos segundos pude sentir su miembro erecto, baje la mirada para verlo (Soy muy curiosa) pero hay mucha espuma en la bañera.
-¿Quieres verlo eh?- preguntó con una sonrisa coqueta en su rostro.
-Sabes que soy curiosa- dije encogiendome de hombros.
-Pues yo tengo una forma de saciar tu curiosidad y saciar otras cosas también-.
Empezó a besarme lento y yo me sentía en el cielo, luego fue bajando por mi cuello, y me empezó a chupar los pezones.
Despues me apretó las caderas, y yo le di a entender con un gemido que quería más.
-Vamos preciosa- Me abrió las piernas y me penetró hasta el fondo yo grité de la impresión.
Luego salió y entró más duro, estaba con un va y ven y mi cuerpo está colapsando.
Hasta el agua se estaba rebosando y callendo en el piso de tan rápido que me lo estaba haciendo.
-Daniii, más duro- Le pedí para que continúe, solo se escuchaban nuestros gemidos.
-Amor me vengo-Me dijo Daniel.
Y llegamos al orgasmo al mismo tiempo, sentí como me llenó completa.
Me desplomé encima de el, y él me sonrió.
-El mejor baño de mi vida preciosa-. Me dijo y solté una carcajada.
-Créeme que el mío igual- Le dije toda embobada con esa hermosa sonrisa.
Después de éso terminamos de bañarnos y nos fuimos a acostar.
-Mi reina ¿quieres ver alguna pelicula?- Me preguntó Daniel muy entusiasmado.
-Pero claro guapo- Le dije aún más emocionada.
El entró a Netflix y puso una pelicula de romance que me parece muy linda.
-Voy a llamar para que traigan algo de comer-. Me avisó Daniel parandose de la cama.
Yo seguí viendo la película y después de un rato sentía que mis ojos estaban cerrándose, estaba cansada y sin darme cuenta caí en los brazos de Morfeo.
Sentí que alguien me estaban llamando, cuando me di cuenta era Daniel que me estaba arreglando en la cama para abrazarme.
-¿Cuando me dormí?- Le pregunté aun con sueño.
-No lo sé, cuando regresé con la cena estabas dormida- me respondió.
-Ahhh, esta bien- le dije aun confundida.
Nos pusimos a cenar y estaba delicioso todo.
Después de un rato terminamos y Daniel me pregunto que si quería seguir durmiendo porque seguía soñolienta.
El sacó los platos del cuarto y cuando regresó nos acostamos, y ahí con amor nos dormimos abrazados.
Sinceramente creo que nada podrá dañar esta hermosa Luna de miel, la estoy pasando muy bien.
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-Dani, Daniel despierta, Daaaniiiii- dije removiendo todo su cuerpo para que despertara.
-¿ahh? ¿que pasa?-
-Ya es medio dia y aún estas durmiendo, estoy aburrida- dije asiendo un puchero.
-Lo siento hermosa, ahora mismo me levanto ¿que hay para desayunar?-
-Daniel, el desayuno paso hace más de tres horas, vamos holgazan ve a bañarte para que atiendas a tu esposa-
-¿Quieres que te atienda a tu modo o a mi modo?- dijo eso último acariciando mis senos y dándome un corto beso.
-Lo siento bebé será a mi modo, quiero salir a conocer este hotel, es hermoso tiene piscina, restaurantes y hasta tiendas, quiero dar un paseo amor-
-Ummm me dijiste amor, eso no es siempre-
Mire a Daniel de mala gana, es sierto que no soy muy cariñosa pero si amo a ese hombre.
-Ya, no pongas esa cara cariño-
Me besó otra vez, y se fue al baño, yo me dispuse a vestirme super hermosa para mi esposo, porque aunque no lo crea, si me dolió lo que la recepcionista de la dulceria dijo.
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El Novio Prometido
RomansaSabrina Lawrence es una joven de 22 años estudiante de administración de empresas que ha pasado por sufrimiento y mucho dolor y ya no cree en el amor. Pero lo que menos sabe es que el destino puede cambiar y hacerle creer en el otra vez en el amor. ...