Capítulo 34 Quédate conmigo

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Dedicado a: JoselineC15.









Nos abrazamos otra vez y nos quedamos en silencio un rato. Es difícil, realmente difícil que todo saliera a la luz, pero ¿y si no hubiera pasado? ¿y si me hubiera quedado engañada mi vida entera? ¿hubiera sido feliz en esa mentira? tal ves si, o tal ves me hubiera dado cuenta en algún momento, al final de cuentas todo pasó muy rápido, el mismo día de "conocerlo" ya quería ir conmigo enserio, y antes de casarnos ya me habia dicho que me amaba ¿me amaba? ¿realmente lo hacía?

-Vas a estar bien Sabrina- dijo Melissa al ver mi cara- eso dejamelo a mi, ahora hay que prepararnos para la cena más llena de emociones jamás vista-

Las chicas se levantaron y salieron de mi habitación, se a que se refiere con <<Cena llena de emociones>> pero la verdad no me siento preparada para lo que podría pasar, tal ves todos se sientan incómodos y decidan no hablar durante la noche, o tal ves hablen de temas totalmente diferentes para, no se, olvidar un rato los males.

Me levanté de la cama y me entre a bañar, preparé la tina con agua caliente solamente y entre por un buen rato para relajarme.

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Salí de la habitación ya lista, decidí ponerme algo cómodo, un pantalón blanco, mis converses negro y una blusa negra olgada y sin mangas.

Bajé las escaleras y me encontré con casi todos en la sala sentados, al parecer la cena aún no está lista.

Y como si el mundo me estuviera asiendo una mala jugada el único asiento libre en toda la sala es justo al lado de Daniel, justo como la primera cena que pasé con David, sólo que al verlo no se siente igual, es tan diferente pero tan parecido a la ves.

Vi que nadie nota mi presencia aún, todos están muy entretenidos hablando así que me tomo mi tiempo para seguir mirando al chico.

Cabello negro hasta los hombros, ondulado y cedoso, su piel es más pálida, como si hubiese estado encerrado por años y nunca le hubiera dado el sol, y sus ojos son misteriosos, creo que yo sería perfectamente capaz de diferenciarlos si algún día vuelvo a tenerlos a los dos frente a mi.

-Oh Sabrina, ven acercate te tenemos una noticia- dijo Melissa.

Me acerqué más a la sala y me senté junto a Daniel, este me miró y sonrió, yo sólo me limité a devolverle la sonrisa.

-¿Que pasa?-

-Pues ya que estamos todos aquí Marcos y yo queremos decirles que...- dijo Melissa y miró a Marcos.

-Me están desesperando- dijo Madison.

-¡Nos vamos a casar!- dijo Melissa.

-¡Oh por Dios Mel!-

Todos fuimos a abrazarlos y la abuela comenzó a llorar, hasta que al fin dan el siguiente paso, esperé esto por mucho tiempo.

Fui a abrazar a Melissa y a Marcos y volví a mi asiento, estoy tan feliz por ellos.

-Creo que llegué en buen momento- dijo Daniel.

Lo miré y le sonreí.

¿Que se supone que le diga? agh.

-Eso creo- dije, este me miró sorprendido y sonrió. Tal ves pensó que me quedaría callada.

-¿Puedo pedirte algo?- dijo en un tono bajo.

-Depende que sea-

-Me gustaría hablar contigo-

-¿Y que me dirás? ¿que te quieres divorciar porque no puedes estar con alguien que estuvo con tu hermano?-

-No, lo contrario, quiero que te quedes conmigo-

Lo miré sorprendida y traté de responder pero noté que todos se comenzaron a levantar, la cena ya está lista.

Nos levantamos y caminamos hasta el comedor, todos se sentaron en los mismos asientos que siempre y por ende Daniel terminó a mi lado. No es que me incomode... bueno si es incómodo, es que... quisiera tocarlo como cuando David fingia ser él pero no puedo, y me duele.

Pero más me dolera ir a un tribunal cuando todo este problema se haga totalmente legal.

Pero ahora lo que importa es que Daniel quiere estar conmigo ¿estar conmigo? ¿porque quiere hacerlo? ¿por mi hijo? ¿por mi? esto no tiene sentido, nada de esto tiene lógica.

Quisiera que nada de esto hubiera pasado.

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