Stony

Fire and the Flood

Lamento cualquier falta de ortografía que lleguen a encontrar :3

-Fire and the Flood-

Suspiró, alzando su mirada al cielo azul, despejado y sin nube alguna...hasta que una nave se interpuso en su vista, un nudo en su garganta se formo, sabia a quien le fascinaría esto, sabia quien admiraría todo.

-¿Steve?

-Le habría encantado ver esto, seguramente estaría encerrado junto a la princesa Shuri...

-Cap

Respiró hondo, voleando a ver a Barton.

-Solo necesitaba aire

-Nat envió esto

Su mirada bajo a la carta que le tendía, sonrió, prácticamente se la arrebato, demasiado obvio, demasiado desesperado. Sus ojos pasando por cada palabra, y aunque corta y concisa, apenas era suficiente.

-¿Todo bien?

-Bien

En realidad no, Tony a penas podía con todo el desastre que dejaron a su paso, al final su plan no resulto como esperaban, fingir una disputa fue...un caos completo, y tras la última carta que se escribieron, aun podía sentir la angustia y aprensión mientras esperaba la respuesta, y es que tal vez liberaron tensión, pero para fingir eran un completo asco.

Quizá el resto si logró actuar, pero entre ellos fue...los golpes no fueron fingidos, cada uno de ellos cargado de odio y molestia, Tony defendiendo su punto de vista, él defendiendo el suyo, ambos en desacuerdo. Cuando envío la primer carta pasaron casi dos meses antes de obtener respuesta, apenas un escueto, cuídate. Era la cuarta carta en seis meses, al menos en esta parecía con mejor humor.

-¿Capitán América?

Scott apareció, podía ver la duda en su rostro.

-Scott

-¿Alguna noticia? ya sabe, también envié una carta...es decir, no es como si espere que Hope, bueno usted sabe, Stark y Pym no...pero si...

-Aun no hay nada, no te preocupes, sé que Tony lograra arreglar todo

-Um...claro, Pym dice que no confíe en un Stark entonces...pero usted es el Capitán América y yo...

-Scott, Tony resolverá esto, lo sé

Siempre lo hace

-Fire and the Flood-

Tony...

Se incorporó, casi cayendo porque...¡dios! de nuevo estaba alucinado. Gruñó, cubriendo su rostro tras sus manos y respirando hondo, su espalda crujió porque ¡mierda! había dormido en el sillón.

-¡Jodido Ross!

El rechinado de una puerta...se enderezo y alzo una ceja al ver a su hijo tratando de pasar desapercibido mientras se desplazaba por el techo, vió el reloj de su muñeca, rodó los ojos.

-Pasaste de tu hora

-¡Mierda!

Peter cayó ante el susto, gimió adolorido al recibir el golpe en su espalda.

-Wow ¿dónde quedó tu sentido arácnido? ¿cómo le llamó Ned?-Tony sonrió divertido-¿punzada?

-No es una punzada

-Ya claro ¿y bien?-se cruzo de brazos-llegas tarde, estas herido y no te diste cuenta de mi presencia ¿y ahora que te pasa?

Peter hizo una mueca, cubriéndose el hombro lastimado, la herida aun sangraba y necesitaba sacar la bala de ahí.