¡Di que eres...!

Capítulo 17.

En ese momento David estaba más que nervioso por lo que Job le diría luego de contarle la verdad.

"Les metí a todos, no soy gay"

¿Era así cómo se lo diría? Ni siquiera lo sabía, solo quería terminar con eso de una vez, así que se acercó y tocó a Job del hombro.

—Oye, Job, ¿tienes un minuto? —dijo David. Al verlo, Job movió su hombro para quitar la mano del castaño.

—¿Qué pasa? —preguntó Job.

—Solo quería decirte que lo de la otra vez, sobre que era gay y que me gustabas, era mentira —si, estaba tan nervioso que repitió la palabra "que" más veces de las necesarias —. Aunque lo segundo ni siquiera lo dije yo...

—Tu amiguito inglés ya nos lo vino a decir, ahora vete.

—¿Te refieres a Cid? —preguntó David algo sorprendido, no creyó que el rubio lo intentara defender.

Job miró a Raimundo, preguntándole si ese era el nombre de aquel chico, a lo que el asintió.

—Si, ese mero —contestó el pelinegro, viendo nuevamente a su, aparentemente, ex-amigo.

—Entonces... ¿crees que podamos quedar en buenos términos? No espero que seamos los mejores amigos o algo por el estilo, pero podemos hablar con con los chicos de vez en cuando —David extendió su mano —¿qué dices?

Job lo observó detenidamente, y luego volteó al lado contrario, ignorando la mano extendida de su compañero.

—Prefiero no arriesgarme —contestó para luego empezar a caminar por el pasillo.

Raimundo vió a David con algo de lastima, se fue acercando hacia él, y en eso Job le llamó.

—¿Qué pasa Ray? —preguntó con calma Erick, quien no había hablado antes por estar en las nubes.

—Me quedaré con David —dijo, agarrando el hombro del mencionado.

Job lo miró con sorpresa —¿primero defiendes al enano, y ahora a él? —hizo una pequeña pausa —¿No me digas que tú también eres...?

—¡No! —en seguida de decir eso, apartó su mano —Yo... Necesito hacer lo de un proyecto con David.

¿Un proyecto? No, Erick iba en su aula y sabía muy bien que no tenían ningún proyeco que hacer. Miró a sus amigos con diversión, sabiendo en seguida que en realidad iban a ir junto Never a la casa de David para Raimundo se desahogara por el comportamiento homófobo del chico que le gustaba.

Después de eso, Job asintió —Ven cuando terminen, estaremos en las canchas —dijo para después irse.

Cuando David los perdió de vista —siéndole fácil por su miopía— volteó a ver a Raimundo para preguntarle lo que sucedía pero este solo suspiró, mostrando que no quería hablar del tema. Al menos no ahí.

Cid apareció corriendo para hablar con David sobre un a serie que vió anoche, pero cuando llegó, él ya se estaba yendo junto a Raimundo.