-hola dormilón, ¿Cómo amaneciste?
Escucho la melodiosa voz de Anna, me despierto y descubro que está mirándome.
-bien y tu.-le contesto.
-bien, con ganas de comerme la palta que preparé anoche.
-lo siento, ahora debe estar completamente negra.-le digo sonriendo.
-arruga la nariz sonriente-lose, es por eso que un tipo llamado Fathy me prometió prepararme otra.
-cuando prometí yo eso.
-anoche.
-y en qué momento que no lo recuerdo.
-mmm será cuando estábamos en la mesa y por casualidad votaste el plato con palta al suelo.
Lo pienso, comienzo a recordar.
En esos momentos tome a Anna en los brazos y la puse en la mesa luego de votar lo que había encima, una de ellas era el plato con la palta.
Recuerdo la cara de disgusto que puso, y como la hice sonreír luego de prometerle que hoy le prepararía el desayuno, con palta incluida.
Ay, estoy frito.
-ahora lo recuerdas.
-si... eso se llama ser tramposa.
-nop, eso significa que caíste en tu propia trampa.
-aun asi te gustó lo que te hice anoche.
-ya quisieras Fathy.-se comienza a reír.
-no tienes remedio.-comienzo a levantarme de la cama, entonces Anna me toma del brazo y me tira para atrás, cayendo otra vez en la cama, luego ella se sube arriba mío. Me mira sonrojada y con ojos vidriosos.
-que sucede.-le pregunto.
-solo quiero ver algo, déjate llevar...
En esos momentos se me acerca tomando mi cara con ambas manos y me besa dulcemente, le agarro la cintura correspondiendo al beso.
Luego de unos minutos besándonos Anna se vuelve a mover y esta vez toma un preservativo del velador, y lo pone en mí ya creciente erección, la cual toma entre las manos y se la introduce poco a poco en su interior, presionando. Ambos gemimos.
Luego comienza a moverse y nuestros cuerpos nuevamente comienzan a danzar, solo que esta vez el baile lo conduce ella.
A cada segundo me está volviendo más loco, sus movimiento me sacian, me llenan. Es una mescla de placer y otra cosa inexplicable.
Me estoy perdiendo...
Comenzamos a sonreír, ella no deja de mirarme mientras esta danzando en mí.
Nuestros cuerpos son uno durante el acto, y luego, cuando mi loca amiga suelta el aliento contenido junto conmigo, y me mira siempre sonriendo, para luego darme otro dulce beso, el cual me llena de ternura.
Mientras que nuestras respiraciones vuelven a la normalidad, ella aun estando encima de mí, le aparto el cabello despeinado, dejando despejado su pecho con todos sus collares enredados.
-¿porque usas tantos collares Anna?-le pregunto interesado.
-no lo sé.-me contesta encogiéndose de hombros.
-mmm, me dejarías verte sin ninguno de ellos.
-para que, ¿Cuál es la diferencia?
-habrá que averiguarlo, ¿me dejas?
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Anna, yo te amo
RomanceNada de lo que pudiera hoy narrar es una excusa a lo sucedido a lo largo de los años desde el día en que la conocí... Aquella fría mañana de abril marcó el inicio de una buena amistad la cual fue protagonista de los mejores años de mi adolescencia...