Me recosté sobre la cama, dejando que mis lamentables lágrimas cayeran de nuevo mientras pensaba. ¿Por qué no podía fijarme en personas de mi edad?
Después de unos minutos, me di cuenta que a Lisa no le interesaba nada pues no se molestó en volver a llamar o enviarme algún mensaje. No le importaba una mierda sobre mí y no creo que pudiera superar eso. No importa cuántas veces me dijera a mí misma que ella no me amaba, porque una parte de mí siempre iba a tener esa esperanza.
Oí un fuerte ruido en la puerta que me hizo saltar del susto mientras me sentaba en la cama. Me limpié mis ojos mojados y fui escaleras abajo para ver quién era. Quiero decir, era domingo por la tarde. Mis padres estaban trabajando así que estaba completamente sola.
Abrí la puerta y estaría mintiendo si dijera que no me sorprendía quién era. Era Lisa y apuesto a que quería una disculpa.
—Lisa—
Antes de que pudiera terminar la frase, me empujó bruscamente contra la pared mientras entraba. Rápidamente callándome mientras cerraba la puerta y apretaba su cuerpo contra el mío.
—Tienes una boca muy grande para ser una chica tan pequeña —casi gimió contra mí, su entrepierna clavándose sobre la mía—. Tengo que darte una lección.
Sus labios se fueron hacia mi cuello y me quedé completamente congelada mientras todavía seguía consternada por el hecho de que ella simplemente irrumpió y me inmovilizó contra la pared.
—Me irritaste, maldita sea —habló sobre mi piel—. Debes pensar mejor en las cosas que dices antes de llamarme cretina.
Seguí sin responder, estaba demasiado aturdida por sus acciones. Sus manos agarraron uno de mis pechos, apretando ligeramente, haciendo que me quedara sin aliento. Parecía enojada, realmente enojada.
Puso sus manos en mi cintura.
—Fui yo, Jennie. He sido yo, ¿de acuerdo? Lo hice, pagué por tu puta educación.
Quería sonreír, pero todavía ella aparentaba estar molesta.
—Lisa, ¿por qué estás tan enojada?
Me ignoró mientras sus labios seguían besando mi cuello bruscamente. Me sentía... ¿agredida?
—Pensé que sería lindo y saqué diez mil dólares de mi propio bolsillo —llevó su mano hacia arriba y con rabia golpeó la pared con frustración, justo al lado de mi cabeza—. Quería sorprenderte, pero eres tan jodidamente molesta, solo debías... —se volvió débil, respirando ligeramente a medida que se pasaba una mano por el cabello—. Sólo tenías que arruinármelo.
— ¿Por qué te importa tanto, Lisa? —le pregunté débilmente—. Lo siento, pero, ¿por qué estás tan ofendida por esto?
— ¡No estoy ofendida! —argumentó, tirando de mí hacia atrás, dejándonos sumamente cerca ahora—. Estoy enojada, no soy ninguna mujer odiosa o una cretina arrogante. Traté de ayudarte porque... bueno, mierda, solo quería hacerlo. No tengo por qué hacer eso, pero al verte tan deprimida me sentí culpable, no me gustó, no me gustó la forma en la que estabas tan triste.
¿Realmente Lisa demostró que yo le importaba? Fue horrible, pero no podía dejar de sentir felicidad. Ya que, básicamente, abrió su corazón justo en frente de mí.
—No era mi intención hacerte daño —susurré en voz baja—. Lo siento mucho.
— ¡No me hiciste daño! —resopló, frunciendo las cejas—. Estoy molesta.
—Estas herida —le respondí en voz baja. Llevé mi mano hacia su pecho, presionando mi palma derecha sobre su pecho izquierdo—. Justo aquí.
Ella extendió su mano hacia la mía, tratando de recuperar el aliento.
ESTÁS LEYENDO
Llámame papi → jenlisa
FanfictionTenía edad suficiente para ser su madre. Sin embargo, ella le llamó papi. [G!P] © 1d_jollygood.