12. Sentimientos de Robot

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Mis sentimientos son confusos estos días.

¡Qué ironía! Tener sentimientos bellos que pueden provocar el éxtasis de disfrutar la vida en toda su plenitud y a la vez conducir a un limbo de confusión e incertidumbre sin salida. He pasado por las dos caras de la moneda, y cada vez que me encuentro en la segunda situación deseo con todo fervor no tener sentimientos, pero la conciencia de haber estado en la primera situación equilibra mi ser. Ahora, más que nunca, necesito equilibrar mi ser.

La razón por la que creo que me he enamorado de Jasper es en gran parte porque he estado leyendo su diario. ¡Bendito diario! ¡Bendita intriga! Tengo ataques de memoria cada vez mas fuertes, cada vez mas frecuentes. Pasa que mi mente está perdida, navegando sobre mi oscuro pasado, rebuscando entre mis neuronas sin tener claro qué es lo que busca y de pronto un recuerdo desagradable desgarra mi conciencia, nubla todos mis pensamientos e inunda con lamento, con sentimiento de culpa, remordimiento y pesar; entonces, al no encontrar salida de este infierno mental, solo quiero desaparecer ¡Maldita sea! Mi cuerpo no es capaz de soporta esta tortura, mi corazón no es capaz de ir a este ritmo; me duele en la conciencia.

¿Qué es lo que me está pasando? Pensé que ya había pasado mi adolescencia hace algunos años, pero esta situación parece decirme que no. O es que así siempre es la vida.

Mi corazón recupera su ritmo normal y entra en calma. Lo bueno es que los ataques de memoria que tengo son solo unos instantes y luego todo se despeja, lo malo es que ese lapso es intensos y doloroso.

Así, con toda mi vulnerabilidad me dispuse a rebuscar en los archivos de Jasper, para ver si encontraba algo más.

Y encontré otro episodio más de sus crónicas delirantes:

¿Cómo puedo burlar el destino de la muerte? ¿Cómo puedo seguir existiendo después de la muerte? Me preguntaba angustiado estando sumergido dentro de mi conciencia, pero fuera de mi mismo, es decir, otra vez estaba alucinando, es como un sueño pero se siente muy real...

De pronto escucho pasos que se aproximan a mi habitación, parece que es mi hermano, porque no recuerdo que haya estado alguien más en mi casa. Mi sospecha se confirma cuando toca la puerta, Tim siempre toca de manera tan particular que es inconfundible, siempre cuatro veces consecutivas, la primera algo inseguro y las tres que siguen son desesperados.

-¡Dame un segundo! - grito. Joder, casi no me da tiempo de cerrar las pestañas de mi computadora y abrir otras carpetas para que no se entere de lo que estoy haciendo.

-Zia, necesito ayuda- empieza sin rodeos cuando lo dejo pasar.

-Bien, aquí me tienes.

-No entiendo a las chicas.

-A ver, ¿qué parte no entiendes? Dame un contexto.

-Mira, los varones podemos ser algo estúpidos de vez en cuando, pero las mujeres son muy incoherentes a menudo.

Es muy curioso, desde que le encaré sobre su coqueteo con las chicas de su colegio, se ha abierto más y conversa sobre estos temas siempre que quiere, eso es bueno, lo malo es que soy la menos indicada para darle consejos, puesto que ahora mismo mi vida sentimental está siendo un desastre, no sé qué decirle. No obstante, me esfuerzo para escucharle y comprenderle, tal vez solo quiere alguien que le escuche; cuando habla, dejo que fluya libremente y él mismo ordena sus ideas, yo solo aporto uno que otra cosa.

Resulta que las chicas con las que anda, se comportan de una manera tan extraña que le desquician a mi pobre hermanito. No te has dado cuenta ­-dice mi hermano- que cuando observas detenidamente su comportamiento, crees haber comprendido todo; sacas una conclusión lógica con base en las premisas que te planteaste considerando todas las variables a raíz de tu observación, y cuando les preguntas si eso es lo que realmente les pasa, aseguran por todos los cielos que no. Son tan incoherentes, tan cínicas, que me sacan de quicio.

AMOR EN LA FRIEND ZONEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora