JungKook un imbécil tatuado, JiMin un tierno chico, amante del rosa y las leches de fresa.
Un chico rudo, lleno de piercings y tatuajes. Enamorado del pequeño chico que usa ropa color pastel e irradia ternura.
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JungKook le pegó otra nalgada, mientras metía otro dedo en su apretada cavidad. JiMin se removió, deseoso de más.
-Quieto, gatito. - Le apretó la nalga, haciendo que el castaño hundiera su rostro en la almohada y aguantara un gemido.
JungKook continuó con su labor, metiendo y sacando sus tres dedos del interior de su novio, hasta que decidió que ya fue suficiente. Tomó las caderas del castaño y acercó su entrada a su miembro, causando que JiMin se estremeciera.
- ¿Lo quieres? - Metió lentamente la punta, pero no más, quería que JiMin se lo pidiera.
-S-sí... - Movió su trasero, en busca de que el mayor este completamente dentro de él. - Por favor, Daddy.
JungKook sonrió ladino y entró lentamente en el menor. Se quedó así por unos minutos, hasta que el ojiazzul comenzó a mover sus caderas. JungKook lo entendió como luz verde y empezó un lento vaivén, para luego ir aumentando su velocidad.
- ¡JungKook!- Gritó JiMin.
El peli-negro giró a JiMin y se acercó a esos esponjosos labios, devorándolos y comenzando una lucha entre sus lenguas, mientras embestía con fuerza el trasero del menor. JiMin gimió fuerte entre el beso, por lo que JungKook le embistió nuevamente en aquel dulce punto del menor.
Cambiaron de posición, ahora JiMin se enterró por completo en el miembro de su novio, pegando saltitos, lloriqueando y gimiendo por tanto placer. JungKook tomó la correa y jaló, haciendo que JiMin se acercará a su rostro, le beso fuertemente.
- ¡Minnie!, ¡pude salir temprano del trabajo, hijo!
Diablos.
(🍨)
A las que no me perdonaron van y chingan a su madre pls.
Atc, esk ando sensivle. ZTOI EN MIS DAIZ CHINGA.
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