Hola...Disfruten la historia.
Era un frío viernes por la mañana, pues el invierno se instalaba lentamente, cuando el celular de Altaïr empezó a sonar con una melodía no predeterminada, se movió un poco irritado, salió de su cómoda posición para sacar su mano y atender al individuo que llamaba.
-Bueno- no quería escucharse somnoliento, pero era inevitable, debido a un trabajo escolar que lo había dejado agotado.
-Buen día, mi nombre es Malik A Sayf, llamó por la información de la habitación en renta-en cuanto escucho su nombre, le dio un escalofrío, y sintió su pecho oprimirse.
"Por favor, que no vuelva a hacerle daño"
-Espere un poco, ahora le comunicó los detalles- Al lado de Altaïr, había una bola encogida, bien envuelto en las cobijas, al jalarlo, la cabeza de Ezio salió.
-¿Qué sucede?- pregunto tallándose el ojo, bostezando, y levantándose con suma pereza, al igual que Altaïr se había desvelado haciendo un informe.
-Quiere saber los detalles de la habitación- informó Altaïr, le acercó el celular y Ezio hizo un gesto molesto, Altaïr salió de la habitación, gracias a que Ezio había puesto calefacción, no se sentía el frío en la cocina.
-Bien, entonces lo recogeré en el aeropuerto-Ezio colgó el teléfono cuando Altaïr regreso, tenía dos tazas de humeante café.
-¿Lo acepto?- pregunto el sirio, Ezio asintió, tomo un poco de café, suspiro el rico aroma, y le dio un suave beso a su novio, luego se volvió a acostar.
-Acepto, pero llegará hasta Junio- dijo Ezio sintió como Altaïr también volvía a acostarse, se acercó y abrazo la cintura del sirio.
-Tienes talento para los negocios- dijo besando al italiano, pero Ezio suspiro.
-Reforzare las habitaciones, así nadie escuchará lo que hacemos- comentó casualmente, Altaïr enredo sus piernas con las del italiano, le dio un corto beso.
-Pervertido- fue lo único que le dijo dejándose enredar entre las caricias y los besos del italiano.
"Gracias por concederme mi deseo".
Las vacaciones de diciembre habían pasado demasiado rápido, ahora a inicios de enero, Altaïr buscaba un trabajo de medio tiempo, y aunque le costó bastante trabajo encontrar un empleo, Altaïr lo encontró como un mesero en un bar, la paga era poca, pero le ayudaría a mantener los gastos pequeños.
Aquella tarde cuando se lo comunicó a Ezio, se había mantenido bastante alejado, Altaïr lo había ignorado, ahora en la sala, mientras el sirio revisaba un proyecto en la laptop, Ezio apareció.
-¿Así que en un bar?- pregunto Ezio casualmente, pero Altaïr sabía de sus intenciones.
-Es un bar familiar, nada de qué preocuparse- respondió y Ezio sonrió, acercó al sirio con lujuria dibujada en su rostro.
-Confío en ti, no confió en los demás- argumentó, odiaba la idea de que Altaïr trabajara, pero había hecho una promesa que debería cumplir.
-Soy un asesino, ¿Quien se aprovecharía de mi?- espetó Altaïr tecleando fuertemente, aún así, el italiano siguió su camino, tocando la pierna de Altaïr.
-Otro asesino, no sé, eres perfecto, me da miedo que te alejen de mi- confesó, su mirada era sincera, y su tono escondía el temor, Altaïr lo beso.
-Nada me alejara de ti- se comprometió Altaïr cerrando su laptop, se acercó a Ezio y lo beso tan profundamente, mientras el italiano lo abrazaba, el sirio se subió en las piernas del italiano, y empezó el baile exótico que jugaban en el sillón.
Era un templado sábado cuando Altaïr servía un poco de spaghetti que compró en algún restaurante, debido a que no sabían cocinar, pero tampoco les interesaba aprender, Ezio a su lado miraba el reloj.
-¿A que hora vendrá el tipo que rento la habitación?- pregunto Altaïr, sentándose en la mesa, colocando queso a su spaghetti.
-Hoy a las 3- comentó Ezio, luego empezó a comer el spaghetti, Altaïr miro el reloj.
-Son las 4, ¿Le dijiste que ibas a pasar por él?- pregunto, Ezio abrió los ojos de sorpresa al recordar que les había prometido ir al aeropuerto a recogerlo.
-¿Crees...?- pregunto pero el sonido del timbre sonó.
-Creo que ya llegó- Altaïr mencionó, y abrió la puerta, un joven entró apresurado, mirando a todos lados.
-Vaya, este es el departamentos de los asesinos maestros Ezio y Altaïr- el joven de cabellos negros alborotados, y ojos azules miraban con curiosidad, era un joven extraño.
-Kadar, compórtate- otro joven que se veía mayor que el otro, miraba con severidad al más joven, su cabellos negros contrastaba con aquellos ojos de color café.
-Vamos hermano- dijo y se acercó a Ezio.- ¿En qué habitación estaremos?- pregunto y Ezio lo acompañó a la habitación, Altaïr dejó que Malik entrará al departamento con las maletas.
-Lamentó los modales, mi nombre es Malik A Sayf, y el irrespetuoso es Kadar mi hermano menor- comentó Malik dejó la mochila y maletas, Altaïr lo observó, se veía decente y sencillo, tanto en actitud como en forma de vestir.
-Mi nombre es Altaïr, un placer conocerlo- se presentó dándole la mano, Malik la estrecho.
-Hermano, mira el baño es enorme- Kadar llegó corriendo y arrastró a su hermano.
-En un momento hablaremos- Malik siguió a su hermano Kadar, Ezio regreso a la sala.
-Bastante animado- exclamó Ezio al ver la actitud del joven.
-Debemos tener cuidado, se suponía que sólo vendría una persona- Altaïr razonó la situación, y Ezio lo miro.
-No siento que tengan malas intenciones, pero si crees que es mejor mantener la guardia- exclamó Ezio, su cuchilla empezó a salir de su funda en la muñeca y Altaïr sonrió, ambos eran buenos asesino.
Malik miraba asombrado la habitación, era grande, además de que tenía una cama matrimonial, un closet, un escritorio, era impresionante, además el precio de la renta era bastante bajo para todo lo que incluía, y le fascinó el baño, se veía bastante elegante, y no tenía que compartir con los demás inquilinos.
-Es una ganga hermano- Kadar sonrió, Malik asintió
-Si, es un excelente lugar- Malik miro por la ventana, la vista mostraba a la ciudad por la tarde, aún bulliciosa, pero al oscurecer era una tranquila vista.
-Viviremos bien, pero debemos conseguir un trabajo para poder pagarlo- comentó Kadar acostándose en la cama, mirando el techo. Malik lo miro, suspiro cansado y se acercó al menor.
-Kadar, llama a nuestros padres- molesto al menor, pues se había escapado de casa.
-Primero paguemos, y llevemos las maletas al cuarto, luego le hablo a nuestros padres- Kadar se levantó, y Malik suspiro derrotado.
-Bien, pero hablaras con nuestros padres en cuanto terminemos ese asunto-respondió el mayor, ambos salieron de la habitación, notaron a Altaïr y Ezio sentados en la sala.
-Dejaremos nuestro equipaje- informó Malik y Altaïr asintió, Ezio estaba concentrado en el programa.
Una vez que dejaron el equipaje, Malik sacó su sobre escondido en el equipaje y Kadar miro a su hermano y sonrió.
-Vamos, quiero descansar- apresuró a Malik.
Altaïr estaba sentado con Ezio en el pequeño comedor, delante de ellos estaban los hermanos
-Bien, no me he presentado con usted, mi nombre es Malik A Sayf, y él es mi hermano menor Kadar, se suponía que sólo vendría yo, pero...- explicó y luego miro a su hermano- Kadar me acompañó, ¿Hay alguna problema que viva aquí también?- pregunto, Ezio sólo miro a Altaïr.
-Un gusto, mi nombre es Ezio Auditore, y no hay problema, pero ¿Ustedes no tienen problema con dormir en la misma cama?- pregunto.
-No, somos hermanos, estamos acostumbrados- Kadar respondió.
-Cállate Kadar- Malik suspiro frustrado- por el pago, ¿Será el mismo precio?-.
-Sí, será el mismo- Ezio contestó, que aún no hacía las modificaciones, pero decidió dejarlo como estaba.
-En ese caso, entregó 5 meses de renta- Malik paso un sobre amarillo, al cual recibió Altaïr, quien se lo entregó a Ezio, el italiano abrió el sobre contando el dinero.
-Perfecto, ¿Que harán aquí?- pregunto Ezio, no debía curiosear, pero quería saber de aquellos hermanos de diferentes personalidades.
-Yo tengo una beca para la universidad de los Ángeles en la carrera de Economía y Contabilidad- contestó Malik, Kadar suspiro.
-La pregunta más importante, es ¿Qué estudian los famosos maestros asesinos?- pregunto, ambos se tensaron, Malik se masajeo el puente de su nariz.
-Kadar, por favor- rogó, pero el joven hermano sólo estaba entusiasmado.
-¿Cómo sabes que somos asesinos?- pregunto Altaïr, su hoja oculta empezaba a salir, Malik observó el destello de la filosa punta.
-Sus nombres están en la lista de la hermandad, lo confirme cuando vi su pulsera, y de él su collar-señaló Kadar sonriendo.
-Doy mis más sinceras disculpas por este impertinente niño- dijo Malik sin dejar de ver la hoja oculta de Altaïr- Como sabrán, nosotros también somos de la hermandad en Damasco-.
-Eso explica todo-respondió Ezio, Malik miro como Altaïr escondía su hoja oculta.
-No recuerdo haberlos visto alguna vez- presionó Altaïr, mirando sospechosamente a Malik.
-Jamás salimos de Damasco, tengo entendido que usted es de Acre, según mi hermano- contestó Kadar, Malik suspiro frustrado.
-Bueno, ya, estamos en descanso, por lo que no se puede decir que somos asesinos ahora,- explicó Malik, ya cansado
-Tiene razón, yo estudio Administración de Empresas- contestó Ezio, su sonrisa mostraba confianza.
-Negocios internacionales-respondió Altaïr, mirando a Kadar, esperando una respuesta, sin embargo Kadar sólo sonrió.
"Parece que todos estamos en el mismo barco"
-¿Nos darían la clave del WI-FI?-pregunto el menor, sacando su celular.
-Si claro, ¿Cuál es la contraseña?- Ezio sacó su celular, pero Altaïr respondió, dictó unos números que Kadar anotó rápidamente.
-Listo, hermano, dame tu celular- Malik sacó su celular y se lo entregó, colocó la contraseña y se lo regreso.
-Bien, supongo que están cansados y hambrientos- comentó Ezio, Kadar negó.
-Comimos unas hamburguesas, no estamos hambrientos, pero si cansados-exclamó, un bostezo afirmó su situación.
-Kadar tiene razón, los cambios de horario nos ha cansado- Malik miro a su hermano-¿Podemos ir a la habitación?- pregunto educado.
-No tienen que pedir permiso, pero revisaremos los detalles de reglas del apartamento más tarde-dijo Ezio, Malik asintió y se fue seguido de su hermano.
Ezio miro a los hermanos irse, mientras Altaïr se levantaba, quería seguir viendo la televisión.
-Sus personalidades son diferentes, el mayor se ve muy serio, mientras el menor, se ve tan extrovertido- observó Ezio, Altaïr fruncio el ceño.
-Se ve que son buenas personas, pero no hay que confiar- murmuró Altaïr, Ezio le sonrió a su desconfiado novio, se acercó dándole un beso en la boca.
-No, ya tenemos dos inquilinos, ya no podemos hacer esto aquí- ordenó Altaïr, sin darse cuenta que un par de ojos azules los observo por error.
-Bien, pero vamos a nuestra habitación- dijo Ezio separándose, arrastró a Altaïr a su habitación.
Kadar cerró la puerta con seguro, se acercó a su hermano que ya estaba acostado en la cama, se acostó a su lado, tocó las hebras del cabello de su hermano, el cansancio dominó a lo hermanos, y cayeron rendidos ante el abrazo de Morfeo.
Malik dormía al lado de hermano, estaba cansado, tan cansado que no escuchó cuando su celular empezó a vibrar con la representante melodía.
-Bueno- contestó somnoliento el mayor de los A Sayf.
-¿Malik?, perdona, ¿Tú hermano está contigo?- su padre pregunto preocupado, Malik había olvidado obligar a su hermano a realizar la llamada.
-Lo siento papá, Kadar vino conmigo- Malik empezó a despertar a Kadar, del otro lado de la línea se escuchó un suspiro de alivio.
-Gracias hijo, estábamos preocupados, ¿Kadar se quedará?- pregunto inseguro.
-Supongo, no tenemos dinero para regresarlo-Kadar se dio la vuelta, cuando Malik empezó a jalarlo más fuerte.
-Pero te dará problemas- comentó su padre, pero Malik suspiro.
-Estará bien, yo me encargó, no te preocupes- Malik dejó de intentar despertar al menor.
-Ya veo, en ese caso, cuídense y pórtense bien, si necesitas dinero, no dudes en pedirme, y gracias a Ala llegaron bien- comentó, Malik escucho de nuevo el alivio en su voz.
-Está bien, estaremos bien, cualquier cosa te aviso- exclamó el mayor.
-Muy bien, ¿y Kadar?- pregunto al no escuchar al más inquieto de sus hijos.
-Está durmiendo, en cuanto despierte, lo regañare- comentó y su padre se rio.
-Eso será mentira, lo consientes demasiado- su padre río, Malik se avergonzó .
-Igual me sorprendió cuando lo vi en el avión- sin darse cuenta, ya estaba acariciando los cabellos de Kadar, en ese momento escuchó la voz de su madre.
-Malik, ¿Llegaste bien?- pregunto la mujer preocupada-¿tu hermano?- inundó a Malik de preguntas.
-Tranquila mamá, Kadar y yo llegamos bien, Kadar se quedará aquí conmigo, así que no pasará nada malo- comento pero bostezo al final.
-Estás cansado hijo, mañana hablamos más, te dejo descansar, no olvides cada semana mandar un correo o llamada, preferible llamada- comentó la mujer, también se escuchaba aliviada.
-Claro, no te preocupes, te quiero mamá, también a papa, y seguro que Kadar se disculpara- comentó y colgó, Kadar lo miro con sus enormes ojos azules, la mirada traviesa.
-Kadar, estas castigado- severo exclamó, el menor sólo sonrió.
-Ya sé, pero vayamos a dormir otro rato- comentó abrazando a su hermano, le dio un beso lamiendo el labio inferior, mientras Malik lo sostenía.
-Bien, pero sin falta les hablarás a nuestros padres mañana- ordenó Malik, aún sosteniendo a su hermano, acercándolo más.
-Sí, mañana- respondió, Malik sonrió, le dio un beso, saboreando el sabor de su hermano, cuando terminó, volvieron a acostarse, mientras se besaban, Kadar sonrió, se acomodó en el hombro de su hermano mayor para suspirar la esencia que este desprendía, mientras Malik acariciaba la espalda, ambos empezaron a caer en los sueños.
"No dejes que se enteren de nuestro hermoso secreto."Hola, gracias por seguir leyendo, espero les siga gustando. Los siguientes capítulos serán de Malik x Kadar.
Volveremos con Altaïr x Ezio en algunos capítulos.
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Un sentimiento en la distancia [Ezio x Altaïr]
Fanfiction¿Qué nos conecta con el pasado?, ¿Por qué te amo si apenas te conozco?, Ahora, ¿Qué misión me obligan a cumplir? Secuela de Un momento a la distancia, deberán leerla para leer esta parte.