#41 La Verdad a la luz

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Si alguien me hubiera dicho que estaría sentada frente a estas personas discutiendo la custodia de Andrea no me lo hubiera creído.

Altagracia: No.

Me levante del sillón y coloque mis manos en la cintura. Comencé a caminar de un lado a otro observando de reojo a Clara.

Altagracia:  Quiero que se vallan de mi casa- solté tratando de mantenerme calmada.

Clara: Altagr...

Altagracia: ¡Dije que se vallan!- grite.

Azucena: Señora, mi hija tiene todo el derecho de reclamar la custodia de su hija.

Altagracia: Su adorada hija perdió ese derecho en cuanto tomó mi dinero y se fue de la casa.

Jaime: ¿De que habla esta mujer?

Clara: Yo...y..

Altagracia: ¿Ah no les dijiste?- ironice, pues sabía perfectamente que no se había atrevido a hacerlo.

Azucena: Deje de asustar a mi niña, usted le quitó a su hija.

Altagracia: Su niña- hice señales con dos dedos en cada mano-  ya creció señora y créame que no tiene nada de niña.  Además que no escuchó que Andrea biológicamente no es nada de "su niña"

Saul: ¿Clara?- Todos dirigieron su mirada hacia la de Clara. Ella volvió a tomar asiento.

Clara: Es verdad, todo lo que dice Altagracia lo es.

Azucena: Mija...

Jaime paso su mano por todo el rostro tratando de mantener la calma.

Clara: Altagracia dio a luz, en el hospital en el que estaba trabajando, ahí fue cuando la conocí. Ella en cuanto me vio me reconoció, yo también.-Hizo  una breve pausa dedicándome una mirada como pidiéndome permiso para continuar, alce una de mis cejas.-Al principio no sabía que su hija, era tuya- miro a Saúl.- Me petrifique, aunque ya todos en esta sala supieran que Luci era hija de Saúl, no me acostumbraba a oírlo, el dirigió su mirada a la mía pero al instante la aparte.

Jaime: Empieza desde el principio, a mi no me interesa saber nada de esa mujer-. Aquel hombre ni si quiera se atrevía a verme-. ¿Por qué te fuiste?

Clara suspiro.
Clara: Creó que hasta la pregunta sobra. Hay muchas cosas que no les he dicho. Yo huí de México con una niña en brazos, Andrea, ella no es mi hija...Fernando tenía una amante y de esa relación nació Andrea, cuando su amante murió el trajo a la niña a vivir con nosotros.

Clara: Les  hice creer a todos que estaba muerta porque como bien lo saben Fernando me maltrataba pero hubo una noche que llegó más borracho de lo normal, no se podía controlar... estuvo apuntó de matarme- dijo con sollozos. 
Clara: Así que lo golpee tome a la niña, el dinero  y me largue de ese lugar. Tenía que alejar a Andrea de ese hombre, no estaba pensando sólo sabía que Andrea tendría una mejor vida si la alejaba de el, y así fue gracias a ti- clave los ojos en los de Clara restándole importancia a su comentario.

Clara: Huí a París con ese dinero  y con la ayuda de de un amigo, el me ayudo a conseguir los pasaportes y un pequeño departamento. Trate de formar una vida, era enfermera, estuve así...sola con Andrea durante 5 años, hasta que un día una mujer llegó luchando por la vida de su bebé mas que por la de ella- baje la mirada recordando aquella situación, tenía tanto miedo de no ser lo suficientemente fuerte para Luci.- En cuanto la ví la reconocí, sus gritos desgarradores habían llamado la atención de mis oidos.

Altagracia: Para.-La interrumpí.- No sigas, no es necesario que cuentes esa parte de la historia, esto no es un cuento.

Clara: No, si es necesario. Fuiste muy fuerte y todos los que están aquí presentes tienen que saber que eres una buena madre.

La Doña IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora