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La idea sonaba muy bien en mi cabeza pero cuando le conté a Jongsu una tarde mientras nos recostábamos bajo un árbol del campus caí en cuenta de lo estúpida que era, ¿dónde conseguiría tanto dinero para el alquiler? Y más importante ¿por qué dije aquello con tanta confianza?

— Con mis pocos conocimientos de las matemáticas sé que si vendes mil manzanas y siete cajas de uvas, con un aproximado de cien duraznos puedes pagar el alquiler y tal vez la electricidad.

— Estoy perdida. — oculte mi rostro con mis manos mientras sentía el estrés poco a poco inundar mi sistema. — ¿crees que podre tener otro trabajo?

— Ni pienses en dejar la universidad.

— No suena tan mal, así tendría más tiempo para trabajar.

— No, luego serás una vieja cansada y amargada que solo piensa en el dinero.

— ¿Aun serias mi amigo?— abrí un ojo y me encontré sus expresivos ojos asintiendo. — está bien, pensemos mejor.

Había conseguido otro trabajo cerca del pueblo, una pista de hielo donde niños y adultos iban. Después de mis clases iba al restaurante a cumplir un turno más temprano, luego iba a la pista hasta casi hasta media noche y subía la montaña para caer muerta. Había sido mi rutina los últimos días y aunque ganaba más dinero aún no era suficiente.

— ¿No puedes pedirle ayuda a tu padre? Él puede aumentar tu mesada.

Jongsu no tenía ni idea que tal mesada no existía, había sido completamente independiente de mi padre al terminar la escuela y el solía pensar que trabajaba solo porque me gustaba, en parte era verdad pero también porque lo necesitaba.

— ¿Qué tal si alquilo habitaciones de mi casa? Hay muchas habitaciones vacías y espacio suficiente para mi sola.

— Eso es una locura.

— Piénsalo bien. — me levante con la maraña de cabello sucia de pasto y mientras lo quitaba el me miraba serio. — si alguien necesita una habitación donde vivir pero no alcanza para un apartamento puede vivir conmigo, incluso puedo cocinarle y lavar. Puedo hacer eso.

— Es peligroso Aegi, no pienses en eso. — él dijo preocupado mientras yo revisaba la hora y empecé a caminar al parqueadero. — no se puede confiar en todas las personas.

La idea permaneció en mi cabeza todo el día por más que Jongsu intentara sacarla, era difícil hacerme retroceder cuando yo daba un paso y él lo sabía mejor que nadie. Incluso cuando publique un anuncio en internet y cruce los dedos frente a la pista de hielo, no iba a ser fácil.

— Los chicos regresaron a Corea después de ganar un billboard, todo el país tiene sus ojos en ellos y no es para menos, se han ganado un lugar en las premiaciones internacionales.

La voz de la presentadora me saco de mis pensamientos viendo a el grupo de Namjoon posando en una gran alfombra roja, me parecía algo divertido ver al mismo chico con maquillaje y hablando en un idioma extraño frente a tantas personas. Un cliente me interrumpió al pedirme unos patines talla 6 y después de buscarlos en la bodega se los di.

Sentí mi teléfono celular zumbar en mi bolsillo y deje a otro chico encargado de la caja mientras me alejaba más a la oscura bodega llena de patines y demás cosas.

— Hola.

— ¿Aegi?

— ¿Namjoon?

— Oh! lo siento si interrumpo algo, creo que escribí mal el numero — escuche unos ruidos de algo en el fondo, tal vez unos lápices cayendo al piso y una grosería — es que estaba buscando en internet un lugar cerca de la montaña para quedarme un tiempo y salió este número.

Trivia 承: Love | KNJ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora