Humanidad perdida

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Después del castigo Zack y Yumi no se encontraron nuevamente. Cuando ya sonó el timbre para que todos se fueran a casa, los amigos de Zack le consultaron si quería ir con ellos a una cita que tenían con otras chicas. Respondiendo que no con amabilidad se dispuso a irse a su casa, ya que no podía divisar a Yumi.

El aun tenia la sensación del vibrador, y cada vez que lo recordaba sentía una electricidad en el cuerpo que lo hacia ponerse muy duro. Ya en camino a su hogar, vee que en su barrio pusieron una tienda nueva, una tienda sex. Zack ve de reojo la tienda y esta tentado a entrar, mira a su alrededor, no viendo a ninguna persona cerca entra a la tienda, entre tantos objetos logra ver el mismo modelo de vibrador que Yumi uso en el. Cuando lo vio en su cuerpo corrió una electricidad complaciente y mas las ataduras bondage que traía, lo estaba haciendo perder la cabeza, toma el control casi perdido de su cuerpo y lo compra, dejandose llevar un poco por sus impulsos.

Al llegar a casa sube a su habitación y utiliza el vibrador, ve una de las ataduras bondage sobresaliente y saca su imaginación a flote.

Desnudo en su cama con el vibrador ya insertado cierra los ojos e imagina a Yumi tirando de las cuerdas con fuerzas mientras su cara de satisfacción se refleja en su rostro por su dolor, zack estaba quedándose en llamas, todo su cuerpo estaba electrisado, caliente, mientras que de su boca salia " ama " " ama repudiame" " ama quiero mas de tu crueldad". Ya estaba quedando poco del Zack de antaño, pero no se sentía arrepentido ni tenia ganas de retroceder, una vez termina va a ducharse. Nota que las cuerdas están haciendo aparecer moretones pero su cara no se llena de disgusto sino de éxtasis.

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