↪ Compañeros... ↩

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Me levanté de sus piernas.
Él se levantó y agarró mi brazo con delicadeza.

--Quiero que estés a mi lado...--Dijo él y suspiró--. No es nada del otro mundo.

--¿Y por qué querrías eso?--Dije para asegurarme. Quería una respuesta clara--. No quiero quitarte tu libertad de diversión.

--Bueno,últimamente había perdido la inspiración para componer canciones. Lo mismo para tocar. Los ritmos ya me parecían lo mismo. Hasta que...--Dijo y luego me miró a los ojos--. Llegaste tú.

Lo miré con cierto sonrojo.
Definitivamente me había derretido el corazón.
Me acerqué sin decir nada y lo abracé.
No había nada más que necesitara que abrazarlo.
Sentí sus brazos rodearme en un cálido abrazo,y apoyó su cabeza en la mía.

--Eres genial--Dije yo sonriendo.

--Gracias pelirroja. Diría lo mismo de ti. Pero no hay comparación. Eres mucho mejor que yo--Dijo y ambos nos separamos del abrazo.

Iba a decir algo,cuando vi venir a Vince con su borrachera encima,abrazando a una chica de la cintura.
A su lado venía Tommy,fumando de nuevo.

--Eh,vamonos,esta señorita quiere tema--Dijo Vince sonriendo con picardía.

--Otra noche más que no podré dormir--Dijo Nikki. Creo que supe por qué lo decía.

--Nada,hermano. Te metes un chute de ansiolíticos,y te duermes en diez minutos--Dijo Tommy,que se sacó de la boca el cigarrillo a medio acabar,y lo tiró al suelo para seguidamente aplastarlo con su bota.

--¿Ansiolíticos?--Pregunté yo--. No deberíais tomar eso.

--Muñeca,aquí tomamos de todo--Respondió Tommy--. Y tu querido Nikki,es un juego de química pura.

--¿Qué quieres decir con eso...?--Pregunté yo.

--Que se mete de todo. Coca,heroína,LSD,Marihuana,pastillasraras--Respondió Vince por él.

--Es un puto loco,pero es el mejor--Dijo Tommy,riendo.

--¿Eso es cierto...?--Pregunté girándome hacia Nikki.

--Bueno...Sí. Pero,¿Qué problema hay?--Respondió mirándome a los ojos.

--Ninguno--Dije yo,y tomé mi chaqueta de cuero para seguidamente ponermela--. Me acabo de acordar de que tengo que irme a mi casa. Mañana empiezan las clases.

--Oh,claro. Nos vemos mañana--Dijo Tommy,que se despidió de mí guiñándome un ojo.

--Sí,buenas noches--Dije y comencé a caminar hacia la salida.

Abrí la puerta del bar y salí con las manos en los bolsillos de la chaqueta.
No quería meterme en medio de ellos.
Y menos en la vida de Nikki.
¿La razón?
Posiblemente estaba tan metido en las drogas que ni era consciente de lo que decía o hacía.
Y eso significa que lo más probable,era que fuera una falsedad lo de que me "quería".
De repente,un brazo agarró el mío.
Me giré.

--Joy,por favor. Déjame explicarte--Dijo Nikki,sujetándome por el brazo.

--Sixx,escúchame. No es que me moleste. Pero no voy a meterme entre tus cosas--Dije yo,y me solté de su agarre--. Si no te importa,quiero que nos tratemos como compañeros.

--¿Por qué cambiaste de opinión...?--Preguntó en un tono decaído.

--No cambié de opinión. Simplemente abrí los ojos. Y decidí que esto debe acabar--Respondí con seriedad--. Bueno...Aunque nunca empezó...

--Sé que no soy un buen ejemplo para nadie. Pero tú me haces sentir diferente--Dijo después. Me estaban entrando unas profundas ganas de llorar.

--No lo hagas más difícil. Si nos besamos alguna vez,tómalo como que fue por dejarnos llevar...Solo eso--Dije,y me di la vuelta para comenzar a caminar.

--¡Te juro que soy capaz de cambiar por ti!--Exclamó según me alejaba.

Sentí una punzada en el pecho.
Me di la vuelta y lo miré.

--Cambia por tí mismo si lo ves necesario...¡No por mí!--Le respondí.

--¡Por favor!--Exclamó.

Negué con la cabeza y seguí caminando.
Las lágrimas florecían y se acumulaban en mis ojos.
Luego salían a presión,como una lluvia interminable.
Deseaba que todo hubiera sido un simple sueño. Que nada había ocurrido.
Yo no era una chica fácil,ni mucho menos. Pero tampoco tan enrevesada.
Me habían hecho tanto daño,que mi corazón tenía una coraza de hierro,blindada y bien protegida.
Para que nadie o nada pudiera herirlo tan fácilmente.
Es por eso que me resistía.
Sequé mis lágrimas antes de entrar a mi casa. Allí estaba mi tía.

--¡Hola,pequeña! ¿Cómo has estado? ¿Qué tal en casa de tus amigas?--Preguntó sonriendo.

--Genial tía...Hubo mucha locura--Dije yo,riendo sarcásticamente y con desgana.

--Me alegro. ¿Has cenado?--Preguntó.

--No. Pero no te preocupes. No tengo hambre--Dije yo.

--¿Y eso? ¿Ha pasado algo?--Preguntó colocando una mano en mi hombro.

--No,tía,no es nada. Simplemente pasamos toda la noche de ayer tomando...Golosinas...Y por la mañana desayunamos fuerte,así que no tengo hambre--Me excusé.

--¿Has bebido alcohol...? Porque huele un poco a ello--Preguntó dudosa.

--No,es el perfume de mi amiga. Le gustan las fragancias fuertes,y...Esta tenía un alto porcentaje de alcohol puro--Volví a excusarme como pude. Pero realmente sonaba estúpido.

--Pues...Siento decir que tu amiga tiene un gusto muy extraño--Dijo y rió un poco. Se lo había creído--. Bueno,no te molesto más,buenas noches querida.

--Buenas noches tía Aria--Dije y le di un pequeño abrazo para seguidamente subir las escaleras a mi cuarto.

Antes de irme a mi cuarto,pasé por la habitación de mi hermano,situada en la misma planta.
Me asomé,y allí estaba,sentado escuchando música.
Toqué la puerta y abrí un poco más,ya que estaba entornada.

--¿Puedo...?--Pregunté.

--¿Para qué preguntas si ya estás dentro?--Dijo en un tono algo enfadado.

--Oh...Cierto. Disculpa--Dije,y entré--. Bueno,quería disculparme por haber sido tan brusca contigo.

--No tiene importancia. Ya eres mayorcita,y no puedo andar controlandote. Bastante he hecho por ti ya--Respondió quitandose los auriculares--. Prefiero que tú te lleves los palos que da la vida. Y que así aprendas.

--¿Los palos que da la vida?--Pregunté suspirando--. ¿A qué te refieres?

--Solo trataba de que llevaras lo mejor posible todo. Que te llevaras menos disgustos por cómo es la realidad. La vida da muchos golpes,y lo vas a pasar mal--Respondió con algo de frialdad--. Pero te vendrá bien para espabilar.

--Ya veo...Bueno...Eso era todo. No pretendía molestar,buenas noches--Dije,y salí de su cuarto.

--Cierra la puerta,por favor--Dijo él,y se acomodó en su cama.

Asentí y cerré la puerta tras de mí según salí.
Me fui a mi habitación,y tumbada en mi cama,le di vueltas a todo lo que había sucedido hasta que caí rendida y me dormí.

"The Southern College"  [Mötley Crüe]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora