Cruzamos media ciudad para llegar a la casa de Arrutia
-¿Es aquí?-pregunto Acker
Asentí,baje del coche estaba frente a una casa de dos pisos de paredes de ladrillo rojo con hiedra seca colgando de las paredes,las puertas lucían maltratadas ya no eran perfectas como lo habían sido en un tiempo ,ahora tenía golpes , grafitis y mucha basura en ellas
Mención aparte de los vidrios ya que estaban algo sucios, mi padre había dejado caer su casa al máximo
Toque la puerta principal luego de haber contemplado la casa ,era la única forma ya que el timbre no servía
Oí unos pasos ,me hice un poco hacia atrás ,Acker se dió cuenta de eso y me tomo de la mano
-Hola-dijo una señora de unos cincuenta años al parecer, parecía ser la suegra de mi padre ,la señora observó a Acker
-vengo a buscar al señor Arrutia
La señora miro de nuevo a Acker,aclare un poco mi garganta para que lo dejara de hacer
-¿Quien le busca?
-el sabrá quién soy, solo háblele
La señora accedió a regañadientes,cerró la puerta por precaución
-¿Nervioso?-Acker me sonrió
-poco,pero gracias por estar aquí conmigo
Se oyeron pasos ,esta vez sabía quién era;abrió la puerta y era mi padre estaba irreconocible para mí,delgado casi hasta los huesos,la mirada perdida en algún punto ,se estaba jorobando su espalda su cabello tenía algunas canas y su tez parecía más gris que blanca ,estaba viendo la sombra de Erik Arrutia
-¿Dylan?-su voz ya no era aspera,ya no tenía esa voz masculina que recuerdo
-¿Como estas?
-Mucho gusto señor ,soy Acker Arana-mi chico extendió la mano a mi padre ,Erik veía a Acker de pies a cabeza
-¿A qué veniste?-pregunto Erik
-tambien te hice una pregunta,no me has contestado ¿Como estas?
No contesto , abrió más la puerta y con su mano nos indico que pasaramos a su casa ,al entrar el patio en el que una vez jugué estaba seco , la fuente que estaba en medio del patio tenía basura y una paloma muerta,entramos al vestíbulo y mi padre parecía tener el radio encendido ,de pronto sentí un olor a humedad bastante fuerte ,todo estaba triste
Llegamos a la sala ,en la pared colgaban tres marcos con unas fotografías un poco empañadas por el polvo
Acker se sentó en uno de los sillones,Arrutia hizo lo mismo ,me acerque a una de las fotos y tome donde había dos niños de cinco años ,uno de ellos estaba montado en una bicicleta y la otra era una niña que jugaba distraída de la presencia de la cámara ,la niña era la que se parecía a mí padre en sus buenos tiempos
-Tus medios hermanos ,Andrea de seis y el niño de nombre Ignacion de ocho -la voz de mi padre estaba muy bajo de tono apenas se escuchaba
-Ignacio salió igual a ti-le comenté pero no hizo caso, me senté a un lado de Acker y le pase la foto para que la viera
-¿Como está tu mamá ?-por fin pregunto pero susurraba-se caso de nuevo¿No?
Asentí sonriendo de manera boba ,observe un instante a Acker pero el tenía puesta su atención en la fotografía
-¿Estas con el no?
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La Agonía de Dylan
JugendliteraturSi llegaste aquí significa que estoy muerto. Atte: Dylan Dylan Arrutia sentía que su vida no tenía rumbo hasta que Acker Arana llegó a su vida y le dio un giro inesperado.