Special Dish | Hayden

6.5K 178 110
                                    

╔════════════════════════╗

Título: Platillo especial

Personaje: Harvard Hottie/Hayden

Advertencia: Insinuación de relaciones sexuales y alguna mala palabra.

Advertencia: Insinuación de relaciones sexuales y alguna mala palabra

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

╚════════════════════════╝

— ¿Tú también te lo comes directamente del tarro? — Escuché preguntar a Grayer, el pequeño que me encontraba cuidando.

— Claro que si, pero está mejor comerse un buen helado de chocolate con pepitas, nata y chocolate derretido por encima viendo una buena película — mis palabras parecieron alegrarlo ya que noté que en su mirada se instalaba un gran brillo propio de un niño.

Y ya sabemos lo que eso significaba para el pequeño rubio.
Tendríamos que ir a comprar a la misma heladería ese mismo helado, la misma nata y mismo chocolate derretido para hacer las mismas acciones que hacía en mi adolescencia y que se habían quedado grabadas hasta el día de hoy.

— Venga, vamos, vístete — ordené, viendo cómo asentía con rapidez y bajaba con cuidado del taburete para luego dirigirse hasta su cuarto —. Y no tardes mucho porque sino van a cerrar la tienda — le avisé, escuchando como soltaba un grito diciendo "no" para que a los pocos minutos saliese vestido.

— Ya estoy listo, vámonos — cogió mi mano y empezó a tironear de ella.

— Todavía te falta el abrigo, el gorro y la bufanda — dije sujetando su mano, dirigiéndome junto al pequeño rubio a la salida, donde en un pequeño perchero estaba todo lo necesario para que estuviese abrigado para cuando saliese de casa —. No queremos que pase lo que te pasó la otra vez con tu antigua niñera, casi me dio un ataque cuando me lo dijo tu madre.

Conocía a aquel pequeñajo desde que apenas era un bebé. Mi madre y la suya se conocían desde hacía bastante tiempo por lo que yo conocí a Alejandra, la madre de Grayer, poco después de que cumpliese los diez años y entonces, siete años después, nació esta pequeña criatura a la que cogí cariño al instante.

El pequeño Grayer, como me obligó que le llamase desde que se fue su niñera, se volvió una parte muy importante de mi vida ya que pasé muchos momentos con él que eran muy importantes en la vida de un infante. Su madre podría llamarme a las cinco de la mañana diciendo que algo le pasaba al pequeño y yo iría sin dudarlo. Se convirtió en el hermano pequeño que nunca tuve.

Annie, su antigua niñera, y yo compartimos alguna tarde juntas mientras el pequeño no estaba con sus padres por lo que nos volvimos amigas y conectamos en muy poco tiempo pasando muchas tardes los tres comiendo directamente de algún tarro que tenía la madre del niño o criticábamos al padre de Grayer por su comportamiento con su familia.

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒  ➽ 𝐂𝐇𝐑𝐈𝐒 𝐄𝐕𝐀𝐍𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora