23

2.5K 203 62
                                        

El ambiente fue pleno y tranquilizador, ambos se hallaban abrazados y disfrutando de los labios contrarios con una alegría infinita y el recordatorio del amor que ambos se tenían.

Cuando llegaron a la habitación principal, la cual estaba siendo iluminada solo por la noche brillante y el resplandor de las estrellas, ambos supieron que no existía mejor momento para entregarse mutuamente.

Las manos del mayor recorrieron con gentileza y suavidad el cuerpo de su pareja, sus labios pasearon por su rostro y mentón, dejando suaves y húmedos besos como muestra de afecto. Zayn se sentía plenamente feliz, sintiendo aquella cercanía íntima que tanto había anhelado las últimas semanas. Hacía poco más de un mes que Liam había regresado a su vida y le había dado un giro tan inesperado que no creía encontrarse en aquella situación.

— Sigues siendo tan encantador y hermoso como siempre — el castaño acarició su mejilla con ternura, solo unos pasos los separaban de la cama matrimonial — siento como si todo esto fuera irreal. Temo cerrar los ojos un momento y no verte cuando los abra una vez más.

— No es un sueño, Liam— tomando las manos del más alto, no dudó en guiarlos lentamente por su cuello y sus clavículas, dejando su tacto en los primeros botones de su camisa — soy completamente tuyo.

Liam desabrochó los botones de la camisa contraria, el roce de sus pieles no fue más que un incentivo para dar paso a la pasión contenida, la cual estaba por ser desatada entre abrazos, besos y caricias. La fina tela cayó a los pies de Zayn, dejando su torso completamente desnudo, mostrando su piel suave y morena a la mirada deseosa de su ex esposo. Liam se relamió los labios, el anhelo de tocarlo fue convirtiéndose, poco a poco, en acciones limitadas y sutiles.

— Te extrañé tanto todo este tiempo — murmuró — extrañé tenerte entre mis brazos cada noche y hacerte el amor.

— También te extrañé — confesó contra sus labios — extrañé tus besos y tus caricias. Te extrañé tanto que no sé cómo pude conciliar el sueño sin tenerte a mi lado.

El castaño delineó su espalda con total adoración y se aferró al sentimiento de pertenencia y excitación que iba abrazándolo conforme sus labios se unían y sus lenguas danzaban, conforme el tiempo corría y sus ropas iban desapareciendo en el suelo. Zayn fue recostado con cuidado sobre las sabanas, viéndose reflejado por las pocas líneas de luz que se colaban a través de las cortinas, su piel se volvió adictiva para su paladar en cuanto fue repartiendo pequeños y húmedos besos por todo su pecho, los gemidos de Zayn inundaron la habitación, la sensibilidad en su cuerpo y la excitación solo eran consecuencia de las manos experimentadas y caricias ardientes de su pareja.

Sus dedos recorrieron los muslos desnudos del moreno, mientras su lengua trabajaba en sus pezones duros y sensibles al paso de su lengua. Malik cubrió su rostro y labios para evitar lanzar aquellos gemidos vergonzosos y evidenciar lo necesitado de tacto que se hallaba. Sin embargo, Liam, quien consideraba aquellos dulces gemidos como los mejores incitadores a sus acciones, terminó por retirar ambas manos del menor y subirlos hacia su cabeza.

— No te avergüences — demandó — adoro escucharte gemir por mi tacto, eso evidencia que te causo placer y delirio cuando te toco, que aun tu cuerpo recuerda mis caricias y clama por tenerme nuevamente.

Una nueva oleada de placer llegó cuando el castaño bajó hasta toparse con la erección bajo la tela del bóxer contrario. Sus labios dejaron besos tentadores sobre la tela, haciendo que Zayn perdiera casi todo su autocontrol con simples acciones. ¿Por qué siempre llegaba a sentirse vulnerable a Liam? ¿Por qué, hacer el amor con el castaño, siempre parecía una experiencia nueva? Tal vez porque el mayor llegó a conocer cada uno de sus puntos débiles, llegó a lugares donde ningún otro pudo llegar y lo hizo sentir completamente amado.

Love Is Not Over (ZIAM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora