Capitulo 10

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                Entro a la habitación que estoy ocupando y cierro la puerta mientras me quedo de espaldas a esta. Mi corazón late muy fuerte y una vez más me pregunto cómo veré a William a la cara, siento la mía arder y siento que tendré un colapso mental.

No sé si podré contarle este episodio tan incómodo a Agatha, la imagino dándome consejos de como terminar de ligarlo. Así que opto por no decir nada y que esto quede entre William y yo.

De repente escucho la puerta del baño abrirse y la otra cerrarse así que aprovecho ese momento para tomar la ducha por la que inicio todo esto y dejar que el agua se lleve todo el pensamiento pecaminoso que mi mente quiere rememorar y que no he dejado salir.

Me meto a la ducha y he decidido utilizar solo el agua fría ya que desde que vi a William desnudo no he podido bajar la temperatura de mi cuerpo y no puedo entender por qué me pasa esto, la voz dentro de mí me dice que es porque nunca había visto un hombre desnudo en vivo, más que en los videos porno que miraba a veces Alejandra mi compañera de habitación. Sí, sí, pero ninguno es como él y es que por más que quiera no puedo sacar de mi sistema a William, me tiene hechizada a tal punto que cuando lo veo, me habla o me mira me hace perder toda mi cordura y me aplaudo por no intentar saltar a él cada vez que lo veo.

Salgo de la ducha y enrollo la toalla a mi cuerpo abro la puerta lentamente para ver si no hay nadie en el pasillo y tengo la dicha que se encuentre libre.

Una vez más entro como alma que lleva el diablo a mi habitación escucho mi celular sonar y es un mensaje de Agatha

**Vamos a bailar**

**Es una pregunta o una afirmación??**

**Ninguna de las dos, solo te estoy informando que los 4 iremos**

**William ya confirmo??**

**De él fue la idea**

No sé cuánto tiempo paso viendo lo que llevo en la maleta tratando de decidir que me pondré y pensando en el hermoso hombre de ojos azules, hasta que mi celular vuelve a sonar

**¿Aún sigues viva o te desmayaste?**

**puedo no ir??**

**ni lo creas, cobarde**

Y se que no tendré tregua con Agatha, desde que esta con Nate se ha vuelto más desinhibida, más viva, más intensa y definitivamente es por la vitamina llamada Nate.

Me decido por un vestido azul y unas sandalias dejo mi cabello con unas ondas, me aplico rímel y labial y creo que estoy lista, mi corazón no ha dejado de latir fuertemente y siento que se saldrá de mi pecho.

Salgo de la habitación voy por las gradas y escucho la risita de Agatha llego a la sala y ahí está sentada en las piernas de Nate los dos en su burbuja. Tanto que no ven cuando llego y la situación para mi es algo incomoda. Hasta que veo bajar a William por las gradas, lleva unos pantalones beige con una camisa blanca y se ve muy guapo.

-Hey ustedes dos, necesitan regresar a su habitación!! – les grita William y a Agatha le han pegado el susto de su vida. Y yo solo puedo reír por la reacción de Nate.

-Vámonos bonita- me dice esto último dándome el brazo y salimos de la casa abre la puerta del copiloto para que suba y me regala una sonrisa de lado que tan bien le salen sube él al lado del piloto y bocina para que los dos tórtolos se apresuren a entrar.

-Creo que hoy alguien está decidido a ir por todo...- Nate le dice esto mientras le pasa un brazo por encima a Agatha y la ve a los ojos.

-Solo quiero pasármela bien hermano.

Corazones incompletosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora