39. Los sentimientos de Naruto

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A la hora del almuerzo Naruto iba a ver a Sakura y su bebé, le habían dado tres días para quedarse hospitalizada y este era ya el segundo día.

Bajó del auto y la prensa comenzó a seguirlo, algo inusual para él, ya que la última vez que lo persiguieron fue cuando ocurrió lo de Margaret. Ella era la famosa, él no.

-Señor Uzumaki nos puede hablar respecto a estas fotos-comentó una periodista y Naruto miró aquella foto, era él y Hinata la primera vez que almorzaron juntos allá en Argentina

-¿Es cierto que esta mujer fue su amante cuando Margaret vivía?

Naruto estresado contestó-No, no fue mi amante, estuvimos un tiempo después de que Margaret falleciera

-Pero la foto fue apróximadamente dos semanas depués del fallecimiento de su exprometida

-Éramos amigos después comenzamos una relación que no funcionó, por favor ahora estoy atrasado-comentó dejando a los periodistas gritando su nombre y más preguntas

Llegó a la clínica, buscó el ascensor con la mirada, hoy no quería subir las escaleras y cuando lo halló, la volvió a ver como si su día no fuera a empeorar. No quería subir las escaleras, así que se acercó de mala gana al ascensor que ella esperaba.

Las puertas se abrieron y ambos entraron

-Ha estado muy cálido en estos días ¿no señor?-comentó ella sin haberle prestado atención. Naruto suspiró ¿debería responderle y hacerse notar? ¿o solamente quedar como el señor desubicado?

-Demasiado cálido para mi gusto-las puertas se abrieron para dejarlos salir y Naruto se adelantó, dejando a Hinata en trance

Ella fue a la nueva habitación de Sakura, ya que le habían cambiado de sala, miró que Naruto se iba a la otra habitación, al parecer no estaba enterado sobre el cambio.

-¡Naruto!-llamó y él se detuvo-Cambiaron a Sakura de habitación, ahora está aquí

Naruto siguió a Hinata a la sala, admirado por su belleza, otra vez odiándose por aún quererla y porque no hubiese funcionado. A veces se recriminaba el hecho de haberle pedido aquello, él no sentía que había sido apresurado pero desde esa vez comenzó a pensar que sí lo era que era impulsivo y eso lo atormentaba hasta el día de hoy. Inclusive comenzó a echarse la culpa del término cuando no era así

-¿Naruto?-preguntó Sakura y él volvió a la realidad-¿No nos saludarás?

Él se acercó sonriendo, beso la mejilla de Sakura y tomó la mano del pequeñin

-¿Ya le colocaste nombre?-preguntó Hinata

-Sí, como pensamos que sería mujer le habíamos puesto Sarada pero ahora se llamará Khan Uchiha Haruno ¿qué tal eh?

-Me encanta-comentó Hinata

-No sabía que vendrían juntos, me hubiesen avisado para decirle a Sasuke que...

-¡Oh no! Solo nos encontramos, pero mañana vendré después del trabajo

Sakura sonrió con pesar, al parecer el juntarlos iba a ser más difícil de lo que pensaba

-¿Y Sasuke viene seguido?-preguntó el Uzumaki

-Sí, de hecho siempre tienen que sacarlo, ahora lo mandé a bañarse e ir a comer

-Pobre me imagino que tener un bebé se les ha hecho complicado

-Sí, a penas dormimos pero imagínate cuando estemos en casa, será más difícil

La Hyuga se quedó hablando con la Haruno mientras Naruto hablaba de vez en cuando y miraba a Hinata cada vez que podía. Sakura lo notó y pensó en un plan

-Sakura-interrumpió la conversación entre Naruto y la mencionada-tengo que irme, debo volver al trabajo, se me fue la hora

-¡Oh! pero ¿si te lleva Naruto?-preguntó Sakura haciendo que ambos se miraron

-No, traje mi auto, bueno... nos vemos Sakura, adiós bebé-dijo mientras acariciaba la cabecita del bebé dormido-Adiós Naruto-se despidió sin acercarse y se marchó

-¿Qué pretendías Sakura?-cuestionó el rubio y Sakura rió

Esta chica no va a ningún lado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora