Feminism ~Kim Taehyung~

La boda: 2da parte

-Mierda- Murmuré al ver el reloj de la pared de la sala -¡Mierda Taehyung!, ya son las cinco-.

-¿Y eso qué?, es sábado- Casi lo asesino. A veces le daba por ser irritante y un completo idiota, pero igualmente lo quería de la misma forma en la que lo quise desde el primer momento en que lo ví a escondidas en el Instituto. En fin....

-Es sábado y a las seis es la boda de Seokjin- Su cara de asombro me causaba risa, de hecho, tuve que contener una carcajada mordiendo mi labio inferior. Por su parte, Tae pasó su mano por su cabello algo estresado. Más estresado que yo no estaba. -Ve a cambiarte, yo me ocupó de Dar Hyung. Además, debo dducharme-.

Al igual que flash, salí disparada hacia la única habitación que había en el  departamento. Desperté a Daehyung quien estaba jugando con sus deditos sonriente. Le quité su pequeña pillama, le cambié el pañal y le puse su trajesito. Al otro lado de la cama, Taehyung se ponía los pantalones al mismo tiempo de que peinada su cabello. Le regalé una sonrisa y entré al balo. Me quité rápidamente la ropa y entré a la ducha. No tuve tiempo para pensar en nada porque en menos de un minuto cerré el grifo y salí de la ducha. Extendía mi brazo para alcanzar el paño y con este mes se qué el cabello y el cuerpo, luego lo enrrollé desde el pecho haciendo que éste cubriera mi torso. En fin, para no aburrirlos omitiré la parte en la que me arreglo y me coloco el vestido que compré.

-Estás hermosa. Deberías usar vestido con más frecuencia- Mis mejillas se tornaron tan rojas como un tomate. Taehyung se posó en frente mío y depositó un corto y dulce beso en mis labios.

-No te pongas romántico. Ya vamos tarde- Asintió y tomó a Daehyung mientras yo tomaba mi cartera y la pañalera del bebé.

***

Al llegar al jardín en donde sería la boda, nos encontramos con que todos lo invitados ya se encontraban sentados en sus respectivos asientos. Nuestros puestos estaban en la segunda fila de sillas a la vista de muchas personas. Me sentí nerviosa porque nunca había asistido a una boda. Taehyung sostenía a Daehyung en sus piernas y yo veía hacia el altar en donde Seokjin y Namjoon se darían su primer beso como esposos. Eso me puso a pensar en cómo sería mi vida si fuese esposa de Taehyung. Realmente no cambiaría nada ya que en sí ya vivimos juntos, tenemos un hijo y de vez en cuando discutimos por pequeñeces; prácticamente nuestra vida era como la de una pareja de esposos y su hijo.

Cuando menos me dí cuenta, Seokjin y Namjoon ya se encontraban tomados de las manos diciendo sus botos matrimoniales en el altar. Me resultó un momento tan hermoso.

-Los declaro marido y hombre..... Puede besar al novio- Namjoon sostuvo el mentón de Seokjin y lo besó de forma apasionada. Todoslos precentes comenzamos a aplaudir felices por la pareja recién casada.

A diferencia de Taehyung, yo no estaba tan feliz por ellos, (realmente si estaba feliz), porque mi cabeza estaba en otro lado, perdido entre pensamientos e ideas distintas tanteando un a que otra de éstas. Me alejé de la multitud en cuanto me sentí aturdida, atrapada; similar a un ataque de claustrofobia. Para cuando miré a mi alrrededor, dedujeran que estaba lejos de todos, estaba perdida. Ni siquiera podía escuchar las felicitaciones a Seokjin y Namjoon por parte de los invitados ni los balbuceos de Daehyung. Me rodeaban muchas plantas y flores hermosas. Nunca me habían llamado la atención las flores ni las plantas, pero debo admitir que esas eran perfectas y delicadas. Algo que yo nunca pude ser.

Caminé sin ningún rumbo porque no tenía ni idea de a dónde ir ya que no sabía en qué parte del gran jardín se llevaba a cabo la recepción de la boda de Seokjin. Estaba anochesiendo cuando un olor a vainilla y champán invadió mis fosas nasales de la misma forma en que la lengua de Taehyung invade mi boca como si fuese de su propiedad cada vez que me besa. Corrí hacia donde provenía el olor y en eso me topé con Seokjin. Tan radiante y guapo como siempre. Con su mano derecha sostenía una copa y con su mano libre, acariciaba un costado del abdomen de Namjoon quien hablaba sonriente con una mujer que aparentaba ser su madre.

-¡Dahyung!, ¿en dónde estabas?, Tae te estaba buscando- Asentí sin prestarle mucha atención a sus palabras. Estaba algo mareada.

-Felicidades por tu boda, espero que sean felices toda su vida- Forsé una sonrisa. Lo sé, fué muy descarado de mi parte. Me sentí extraña en ese lugar porque no conocía a nadie más que a mi propio novio, mi hijo y sus hyungs.

Seokjin sonrió y luego volteó a mirar a su ahora esposo que aún hablaba con su madre. Seguí caminando con calma. Buscaba a Taehyung con la mirada por todo el lugar. Solo habían mujeres con costosos vestidos y lujosas joyas, hombres con trajes de marca y relojes caros mirándome con expresión de confusión, con rechazo en la mirada. Me sentí incómoda e incluso intimidada, estaba claro que yo no pertenecía allí, no era bienvenida.

-¡Dahung!, te estaba buscando, ¿en dónde estabas?- Su voz me devolvió a la tierra -¿Estás bien?, estás algo pálida- Escuché como Daehyung balbuseaba cosas sin sentido ignorando por completo a Taehyung que estaba preocupado.

-Vámonos, por favor- Su mirada de confusión era tan tierna. Veía todo borroso y los pequeños chillidos de Daehyung me aturdían tanto como la esa de las personas que nos rodeaban.

No podía mantenerme de pie con facilidad. Me apoyé del hombro derecho Taehyung para mantener el equilibrio. Me tambaleé un poco y Seokjin corrió hacia donde nos encontrábamos para ayudarme ya que Taehyung tenía en brazos a Daehyung. No podía respirar bien y todo se volvió negro ala instante. Las voces de la multitud, los balbuceos d Daehyung y los gritos de ayuda de Taehyung se eacuchaban a la lejanía.

-¡Dahung!- Gritos, una sirena de ambulancia, Taehyung, oscuridad, fría y vacía oscuridad. Agh.