Feminism ~Kim Taehyung~

Sólo un simple favor

-¡Señorita Jang!- Soñaba despierta mientras el viejo profesor de matemática explicaba su "importante" clase. Admiraba a distancia como Taehuyng mordía y relamía sus labios cada vez que no entendía o se le dificultaba algo. -¿Se le ofrece algo señor chang?- El hombre me miró con recelo y luego siguio explicando cosas a las cuales no les prestaba atencón. Sabía que sus delgados y perfectos labios habían besado a los de otro chico antes pero la tentación de probarlos era demasiada. ¿Cómo podría acercarme a él sin sentir la necesidad de besar a ese bello castaño. Allí fué cuando se me ocurrió la maravillosa idea de pedirle que me ayudara a ser más femenina. Al principio ni yo entendí mi interés por aquella locura pero me apegué al plan que se había formulado en mi cabeza. La clase acabó y los alumnos salieron disparados al patio en donde se encontraron con sus amigos de otros niveles, y Taehyung no fué la ecepción, él también se encontró con Hoseok quien no dejaba de sonreir, ni tan solo un momento -Hey Tae, la chica de esta mañana se está acercando- El nombrdo mordió levemente su labio inferior y volteó a mirarme con una linda sonrisa en la comisura de sus labios. -Taehyung...- Mis palabras salieron en un susurro tímido casi inaudible. -¿Podrías ayudarme con algo?- Taehyung suspiró y luego Hoseok nos dejó solos. -¿Qué es lo que necesitas?-...

***

-Cuando me dijiste que querías ser más femenina no creí que sería tan difícil lograrlo- Taehyung se veía algo molesto pero igualmente me reí por su comentario. -Tú si te quejas- Le sonreí y, no se como lo logré, pero me devolvió la sonrisa con aquél brillo en su mirada que pocas veces he visto. -Tú eres muy terca- Se hechó a reir en frente mío sin pena alguna. -Sólo ayudame a elegir un maldito vestido- Taehyung asintió y tomó un vestido azul marino y me lo entregó. Tomé aquél vestido que simplemente era hermoso pero no lo quería admitir así que solo entré al pobrador y me lo coloqué. Cuando salí lo llamé por su nombre y al instante se apamirada.en frente mío. Sus ojos se iluminaron  al verme y me isnpeccionó de pies a cabeza con la mirada. -¿Co..cómo me veo Tae- Se quedó unos segundos callados y luego me respondió -Si si...- Bajó la mirada con nerviosismo. Por alguna razón muy extraña, se me ocurrió la idea de retarlo a que se pusiera el vestido. -Te reto a algo...- Me miró con curiosidad -Te reto a ponerte el vestido- Sonreí de una forma tan psicópata que hasta yo misma me asusté -Ok ok...- Me arrebató el vestido y entró al vestidor. Sin decir nada, yo también entré y como había tan poco espacio, terminamos cara a cara. Nuestras narices rosaban y podíamos sentir la respiración del otro. -Yo...- Debía decirle la verdad pero no podía, y como no podíamos movernos bien, no tuvimos más remedio que abrazarnos para poder salir. En un descuido, sus labios chocaron con los míos y tube la oportunidad de probar mi devilidad. Sus labios eran tan suaves como algodón y dulces como la miel.

Fué el mejor día de mi vida.... Pero su peor error?