Capítulo 29

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DIANA POV

—  ¿Están todas? — pregunta el rey Nereus subiendo a la nave luego de despedirse de mi madre

—  ¡Sí! — exclamamos todas emocionadas

— Bueno, entonces vam...

— ¡Esperen! ¡Falto yo! ¿Qué les pasa? — grita interrumpiendo Artemis quien viene corriendo rápidamente hacia nosotros con un montón de cosas en las manos

— ¿Qué? ¡No! ella no viene ¡Vámonos! — gritan inmediatamente Jenn y Tula haciéndole señas al capitán de la nave para que nos vayamos

Todas empezamos a reír, incluida Artemis quien de un salto subió a la nave

— Rey Nereus, un gusto verlo de nuevo — saluda la semidiosa al padre de Mera

— El gusto es mío Artemis, es realmente un honor que nos acompañes, espero que disfrutes del viaje — sonríe Nereus quien recibe una llamada telefónica, se disculpa y se aleja para atenderla

— ¿Qué haces tú aquí? y ¿Por qué traes tantas cosas? — le pregunta Jenn con el ceño fruncido a Artemis

— Me invitaron a venir ¿no es obvio? — dice Artemis con su sonrisa prepotente causando que las dos Xebelianas bufen con molestia

— Creo que Diana ya tiene la suficiente protección solo con las chicas — vuelve a intentar Jenn a lo que Artemis suelta una carcajada

— Lo sé, no solo vengo como guardia de Diana, vengo como invitada de honor. No todos los días puedes contar con la presencia de la única hija de Artemisa — dice engreídamente la pelirroja

— Uhg, no te soporto — bufa Tula para luego darse la vuelta y ver por la ventana

— Tú me amas — bromea Artemis causando que Tula vuelva a gruñir

La semidiosa es llamada por el rey Nereus, al parecer quiere mostrarle cómo funciona la nave. Observo como un destello de felicidad pasa por los ojos de Artemis, al parecer realmente está emocionada por estar aquí

Doy la vuelta en mi lugar y me abrazo a Mera, quien sonríe para luego dejar un beso en mi cien

— ¿Crees que Artemis se sienta mal por el rechazo de las chicas? — susurro en su oído para que nadie más nos escuche

— No lo creo, a Jenn y a Tula pronto se les pasara el enojo — susurra de la misma manera — además, creo Artemis lo sabe, es por ello que sigue empeñándose en molestarlas

— ¿Tu lo crees? No me gustaría que se sintiera mal — hago un puchero a lo que Mera me abraza mas

— Eres una ternurita — apachurra mis mejillas — si quieres podemos preguntarle luego, para estar seguras

— Eso estaría bien — sonrío levantando un poco la cabeza para darle un besito en su mentón — ¿estas emocionada por volver a casa? — pregunto a lo que ella asiente sonriendo

— La mejor parte de volver a casa es que tú vienes conmigo — dice mientras sus ojos quedan fijos en los míos, una sonrisa aparece en mis labios y mi corazón palpita lleno de amor

— Oigan tortolitas — interrumpe Artemis por lo que ambas volteamos a verla — lamento romper su momento de romanticismo, pero el capitán dice que es momento de ponerse el cinturón de seguridad

Ambas asentimos y proseguimos a hacerlo, la semidiosa decide sentarse a mi lado, me giro a verla y le regalo una leve sonrisa que es correspondida de forma inmediata

La nave empieza su recorrido hacia el reino de Xebel y luego de unos largos minutos por fin llegamos, no importa cuántas veces venga a Xebel, jamás dejare de sorprenderme, escucho un leve jadeo de sorpresa proveniente de Artemis y las chicas no pueden evitar verla con una tierna sonrisa en su rostro, incluidas Jenn y Tula quienes siguen estando molestas con ella

Wonder Woman & MeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora