cap 3

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Era mi padre.
Me regaló una sonrisa compasiva mientras cocinaba algo en la olla.
Recordé que él era buen cocinero.
Pero también me acordé de otra cosa, y mi vista se nublo. Él habia fallecido hace 4 años.
Esto no podia ser cierto.

Vas a estar bien, mi cielo. Dijo. Te lo prometo.


No entendí a que se refería.

Me tape los ojos con las manos, esto ya me había pasado antes.
Me convencí de que todo era un sueño, de esos que parecen tan reales.
Lo extrañaba tanto, tal vez por eso soñaba con él.

De pronto el olor a comida ya no estaba.
Abrí los ojos y mi padre no estaba.

Subí las escaleras hasta mi habitación. La puerta estaba semi abierta.
Con dudas di unos pasos hacia adentro.
Mi respiración se detuvo cuando vi a un desconocido esperandome allí, en medio de la habitación.
Sin embargo algo me dijo que iba a estar bien.

El hombre caminó hacia mi.
Sentí un escalofrío en todo el cuerpo.


Sus ojos, su cabello y sus anillos, era él. La misma persona que vi hoy.


Alzó su mano dejando ver una bella rosa.
Y me la entregó.
La tome con delicadeza, sin despegar mis ojos de los de él.


....

¡AMBER!. era la voz de mi mamá.

Mamá! Grite molesta. ¡Me despertaste!

Lo siento, no contestabas mis llamados y subi a verte. Dijo saliendo de mi habitación.

Fue un sueño pero se sintió tan real. Hasta pude sentir las pequeñas espinas de aquella rosa en mis manos.

***
Enrolle el tenedor en los fideos con crema que mamá preparo. Hacia mucho tiempo que no cocinaba.
Siempre lo hacia papá.

-Siento no haberte esperado con la cena, hablé. Pero no sé en qué momento dormí tanto. Rei apenas.

No te preocupes hija. No fue un dia tan agotador.

-Mamá.. volví a hablar. Ella me miro atenta. ¿Que significa soñar con papá?

Ella sonrio de lado.
Bueno, soñar con familiares fallecidos significa que recibirás amor y respeto... o tal vez quizo transmitirte algo importante. Ella soltó el tenedor y acarició mi brazo.
A veces no nos damos cuenta de las señales que nos da la vida.

Le sonreí a mi madre.
Agradezco tenerla en mi vida.

Luego de lavar los platos, subí a mi cuarto.
No podía dejar de pensar en ese hombre. Ojalá supiera su nombre. Definitivamente alboroto toda mi mente.

Cerre la puerta a mis espaldas. Me tense al ver una rosa en la almohada de mi cama.
No puede ser...
La mire sin poder creerlo, era la misma que el me dio.
Mi corazón se aceleró, tratando de asimilar esta situación.
Tiene que haber otra explicación, pensé.

La coloque en mi mesita de noche.

¿Como es posible algo asi?
Las dudas me invadian, pero no quería preguntarle nada a mi madre.

Me acosté tomándome hasta la cabeza.
No pude evitar preguntarme si todo esto volvería a pasar.
Tome mi teléfono y googlie: "como saber cuando estoy soñando"

«las personas que intentan tener sueños lúcidos y controlarlos pueden verse inmersas en sueños realistas, particularmente en bucles de falsos despertares que pueden resultar muy ansiosos»
-observa tu entorno, Por ejemplo, puede que te des cuenta de que te encuentras en un lugar en el que nunca has estado o de que las personas que te acompañan ya fallecieron o son personajes de ficción.

Una notificacion me saco de la lectura.
Era un mensaje.
De Zayn.
Maldita sea.

Abri el mensaje.

"¿Podemos hablar?"

No respondí, no queria hablar con él.

No me había dado cuenta, pero hoy fue el único dia que no estuve pensando en Zayn. Y en como me hace sufrir.

Lo unico que esperaba es que no apareciera por mi ventana. Ya que el siempre subia por ahi para vernos a escondidas de mi mamá.

Pero corri la cortina, y ahí estaba. Maldije por dentro. ¿Porque tenia que hacer esto mas difícil?
Movio su mano en forma de saludo y abrió la ventana. Debería ponerle seguro.

-Te dije que no quería verte Zayn, vete. Hable enojada pero en voz baja para no despertar a mi madre.

Di unos pasos por mi habitación y el me siguió.
Su expresión reflejaba cansancio.
Diablos de igual manera era tan lindo.

Te extraño Amber. Se acerco hasta invadir mi espacio personal.
Podía sentir su respiración chocando en mi rostro.

-Se lo que quieres. Y a decir verdad yo también quería. Pero mi orgullo era mas fuerte. Pero lo que sea que teníamos se terminó. El rodo los ojos. Tomo mis mejillas y sin discutir unió nuestros labios.
Sus movimientos eran lentos pero luego algo desesperados.

Había vuelto a caer en su juego.

Sueños Compartidos | H.S  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora