Mantuve una breve discusión con el profesor, que tuve la inmensa desgracia de que sea nuestro tutor, porque haya decidido cambiar los sitios de clase. Primero decide de ponerme en tercera fila pegado al lado derecho, después me aleja a Martín de mi lado porque nos considera que juntos somos una mala influencia y para finalizar con el colmo de los colmos, me tendrá más vigilado, según él, que ahora no me quita ojo ni para respirar. Y todo esto por no nombrar a mi querida compañera de clase (cómo me gusta el sarcasmo). No la odio pero es una plasta cuatro ojos de mucho cuidado. Antes de que se sentara ya yo levantaba la mano, aunque al parecer tampoco se puede reclamar nada. A pesar de que sea una tiquismiquis y de que su supuesta humildad que guardan debajo de esa sonrisa me da asco, creo que le sacaré el lado positivo a todo esto: podré divertirme molestándola. Al menos me pusieron a Claudia Vázquez delante, la chica más guapa y sexy de todo el instituto.
Por lo demás el día solo fue empeorando. La profesora de historia me sacó de clase por asegurarle que su asignatura estaba muerta desde hacía mucho y no le importaba nadie.¿ Acaso la historia no sucedió hace muchos años y está en el olvido? Por no hablar del viejo de religión ,parece que se va a morir dando la clase ¿No debería jubilarse ya?
Después de un día caótico por fin a las 5 de la tarde dirían cuál sería nuestra habitación compartida. No creía que me pusiesen con Martín porque el año pasado solo duré dos semanas con él, ya que inundamos la habitación nada más instalarnos, fundimos los circuitos de la luz y el Instituto se quedó sin luz una semana, provocamos una guerra de comida en la cafetería...y un etcétera muy largo. Al menos pedía que me tocara con alguno de nuestro grupo o algún allegado mío. Bueno, me conformaba con que fuese un chico, o , para excepciones, Claudia Vázquez o alguna por el estilo. Mis esperanzas duraron poco cuando el director dijo:
- Este año se ha decidido que como mismo están sentados en clase se quedarán en las habitaciones. Quién se queje será expulsado de la escuela.-
No podía ser, no con esa chica. No con esa plasta.
- Vaya con el gafitas, expulsados dice- me dijo Martín susurrando- Bueno, no es una maravilla pero David Torres está bien como compañero de cuarto.-
-Habla por ti- respondí enfadado- Yo tengo a doña cuatro ojos.-
Martín soltó una carcajada, que paró cuando vio mi expresión seria.
-Vaya, se siente. Ya le sacarás burla, míralo así.-
Nada que añadir.
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De Plasta , A Mi Amor
RomanceZac adora meterse con Zoe, pero...y si acabase sintiendo algo por su bulling? Él no lo cree, pero cada vez que la mira, esos ojos azules lo enganchan y esa sonrisa le borra los problemas. ...