Destinados

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— Capítulo 14—

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— Capítulo 14—

Te amo.

¿Alguna vez han escuchado sus latidos del corazón en sus propios oídos? Como si estuvieran lo suficientemente cerca para escucharlos, sin la necesidad de un estetoscopio, solo con la urgencia de correr hacia el causante de su aceleración.
El sonido retumbaba en las orejas de Tamaki, la taquicardia que le provocaba aquel rubio de brillante personalidad era cada vez más constante. Y el rubor no tardó en subirle al rostro, coloreando su pálida piel de una vez, llegando hasta su cuello.

Eso ya se había vuelto costumbre desde que escuchó su voz por primera vez.

Si quiso decir algo, murió en sus temblorosos labios que se apretaron, no quería balbucear. Los pensamientos saltaban de aquí y allá, no había orden en su mente, como si de un corto circuito se tratara.

¿Él dijo...que...me ama?

No podía cubrirse, no, estaba completamente indefenso ante los orbes bonitos y curiosos del rubio, se sentía avergonzado porque estaba seguro de que podía ver a través de él.

No había escapatoria.

Y de cierta forma le gustaba, porque se trataba de Mirio.

Aquel chico que acelera su corazón, con solo estar en sus pensamientos.

No huiría, en primera, nunca debió tratar de huir si era aquí, donde es su lugar, donde es feliz. Ahí, junto a Mirio Togata.

—¿Tamaki?

A ver, Mirio no sabía si llamar a una enfermera o a un bombero.
Que Tamaki estaba tan rojo que parecía un tomate y el sonido de su corazón, más parecía un tambor.

¿Eso es a lo que refiere cuando dice que le provoco taquicardia?

Lo podía escuchar alto y claro, al estar tan cerca de su pecho.

¿A esto se refiere Hadou cuando lo llama corazón de pollo?

Diría, ¡llamen a una ambulancia!

Pero se encuentran en un hospital.

Agradecía la habilidad de Recovery Girl, la recuperación acelerada en su cuerpo se había completado gracias al descanso que pudo tener en la noche. Dormir abrazado a quien ofreciste tu corazón, y que esa persona lo tomara con el mayor cuidado para cuidarlo con todo su amor, no podía ser comparado. La sensación tan indescriptible, tan mágica e irreal, solo podía ser por causa de Tamaki, si es que la vida le colocó en el camino lo más cercano a un ángel que lo motivó en todo el camino.

Fue como si la vida le diera el empujón a saludar a ese niño solitario que quiso murmurar: héroe.
Y si era ese el destino, lo aceptaba.

Como si sus emociones se reunieran, decidieron dirigirlo y tomar la palabra, solo se resumía en dos. Solo dos palabras que resumían todo lo que sentía, que serían el colapso mental del menor en sus brazos.

¡Son muy Puros! [MiriTama] BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora