Desde del sábado me sentía más aliviada, y de muy buen humor.
Al llegar a la escuela fui en busca de Millie a su casillero, después del sábado se sentía un poco culpable, pero creyó que sería lo mejor para mi, y lo fue.
-Hola guapa.- dijo al verme
-Hola linda.- contesté.
-No lo vas a creer.- Millie me contó que se había encontrado con Wyatt, que se pusieron al día y esas cosas, por su parte Noah no estaba tan feliz por la noticia, pero había pasado ya mucho tiempo para mantener rencores.
-Recuerdo que fue muy agradable.
-Si me agrada poder ser su amiga. Ahí viene Romeo.
No conocía a nadie llamado Romeo, así que volteé para ver de quién se trataba. Era Finn, mire a Millie irónica.
Aunque sólo estaba a una distancia reducida, Finn solo nos dedicó una sonrisa y siguió de largo. Decir que estaba desconcertada era poco, no entendí su actitud. Intentaría hablar con él después.