Amor prohibido [Erick pulgar y tú]

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-Parece que nos cagaron porque no hay nadie afuera weón- dijo el Edu mirando por la ventana.

-Igual bacán, porque en cualquier momento me daba diabetes-.

Pucha que era pesao el Charles.

-Nadie te manda a escuchar las weas po'- le respondí.

-Oye y ¿cómo que durmieron juntitos?-.

-Eso po', una vez estábamos hablando y la fui a ver a su casita y se me pasó la hora-.

-Ojalá no sea la vez que salimos al carrete y los dejamos solos-.

-Mmm, voy al baño y vuelvo- dije levantándome al baño para escapar.

Una vez que estaba adentro me di cuenta que me estaban enviando muchos mensajes.

Guardé mi celular satisfecha con haberle dicho todo lo que pensaba y me comencé a arreglar, mirándome en el baño del espejo.

Cómo había sido capaz de salir con alguien tan weón por la chucha.

Lo bueno es que en menos de una semana estaría yendo al nuevo colegio con los cabros y no vería más a esa caca.

Me lavé la cara y salí del baño, encontrándome con el Erick que seguramente venía a buscarme.

-¿Todo bien?- me preguntó.

Pucha no le podía mentir

-Sí, recién me escribió el Charquicán pero lo mandé a la chucha yera-.

-Acuérdate que cualquier cosa me avisai nomás y le saco la chucha-.

-Cabros, apuren la causa-gritó el Charles desde el living.

-Oe sí tengo el poto acalambrao'- gritó también el Edu.

•••

El tiempo se pasó volando, después de un rato ya estábamos todos cansados, así que nos fuimos a acostar.

El Erick se iba a dormir en el sillón, así que le dije para dormir juntitos.

Ni ahí con lo que pensaran los demás, para mí dormir con él era dormir con un guaterito gigante.

Y tampoco iba a dejar que durmiera todo solo en el living, porque obv el Edu se acostó con el Charles, porque después con dolor de espalda no iba a poder llevarme la mochila.