capítulo ocho:
Salí corriendo en lcuanto Harry sonó la corneta que anunciaba nuestro tres minutos para escondernos. Estaba casi segura de que a nadie le daría tiempo de llegar a la iglesia y que probablemente alguien terminaría ligeramente chocado por la esquina de un carro, pero era riesgos que te hacían hervir la sangre y daban más emoción al asunto.
El grupo de fugitivos estábamos corriendo por una de las calles repletas de locales del centro, y es que apenas parecían haber pasado unos segundos, cuando el motor de los carros rugió detrás de nosotros. Aceleré entonces y al final de los locales crucé hacia la calle Winpool. Había localizado los arbustos perfectos para empezar a merodear cuando Gwen pasó fugaz a mi lado.
— ¡Busca otros, Vee! —exclamó en medio de una carcajada—. Hice una apuesta con Clark y no pienso dejar que me atrape.
Blanqueé los ojos ligeramente divertida y corrí más fuerte, lanzándome hacia el jardín de una casa cuando las luces de los autos comenzaron a parpadear detrás de mí. Me arrastré con los antebrazos por el jardín hasta detenerme detrás de un enorme rosal, teniendo especial cuidado de no pincharme con alguna espina.
Antes no habría dado especial atención al entusiasmo de Gwen, pero después de oír del tal Seth y como le gustaba, me parecía extraño que pudiera seguir la relación como si nada hubiera pasado cuando en realidad planeaba ir con otro chico después de la graduación. Diría que también me sorpendía que Clark no se hubiera enterado de nada, pero no esperaba nada mejor de un tonto como él.
Cuando los dos autos desaparecieron al doblar la esquina, llevándose la música y los gritos de adolescentes emocionados con ellos, asomé la cabeza por el borde del arbusto hacia la calle. Vi movimiento del otro lado de la acera pero seguramente eran otros fugitivos, así que no le di importancia. Me levanté y corrí por el espacio entre dos casas que daba entrada a la calle detrás de ellas.
Como era de esperarse, fui atrapada a mitad de camino. Un chico de ojos verdes y cabello misterioso envolvió sus brazos con fuerza alrededor de mí y me levantó del suelo.
Y más que sorprenderme, mi corazón se detuvo al ver qué tan cerca quedó mi boca de la de Grizz.
—Tienes que estar jodiéndome —exclamé, entre molesta y divertida—. Solo ha pasado como media hora, ¿eres un detective o qué?
—Tengo mis métodos para rastrear personas —él se encogió de hombros. Sus brazos estaban envueltos alrededor de mi cintura y ambas manos reposaban con tranquilidad en mi espalda baja. Me fijé que tenía un ligero raspón en la sien izquierda.
— ¿Qué te sucedió? —pregunté, deshaciéndome de su agarre muy a mi pesar y tomándolo de la mano para guiarlo hasta una de las entradas laterales de una casa. Había un pequeñísimo porche con un barandal, escalones y una puerta pintada de azul. La luz amarilla estaba encendida, así que hice que Grizz se detuviera debajo del bombillo para examinarlo mejor.
—Tal vez me caí cuando salté del carro de Luke —se encogió de hombros nuevamente, sonriendo aún así. Inclinó la cabeza ligeramente hacia mí y volvió a pasar sus brazos alrededor de mí. Grizz olía a menta y a colonía, y por alguna extraña razón lucía perfectamente cómodo con nuestros labios estando tan cerca, así que alcé el mentón. Esto trajo el gesto serio de vuelta a su casa.
Mordí mi labio con fuerza, mientras trataba de entender el porqué de su reticencia a tener algo casual conmigo si yo le gustaba. ¿No se supones que quieres enrollarte con la persona que te gusta?
—Sé que quieres besarme, Gareth —murmuré, moviendo la vista desde sus ojos a su boca—. Y sabes que yo quiero también, ¿así que por qué no nos dejamos llevar, sólo por hoy? —suspiré, de repente temblorosa ante el hecho de mi cuerpo tan cerca del suyo—. Todo se puede arreglar. Lo que se que hagamos hoy, lo solucionaremos mañana por la mañana.
ESTÁS LEYENDO
Part of Me ❦ [Grizz Visser; The Society]
Fanfiction❝Sé que lo que ha pasado es una tragedia y que probablemente terminemos muertos en medio de este caos... pero me alegro. Me alegro de haberte encontrado aquí y ahora❞ Heaven se mudó a West Ham cuando tenía nueve años, ella y su padre venían intentan...