15. Una fuerza protectora llamada mamá
22 DE Marzo DE 2014 (24 AÑOS) (1 mes y 10 Días)
Un nuevo día, un día que pretendía utilizar para descansar, digamos que el primer mes de tener a los angelitos en casa había sido más que simplemente agotador, habían sido muchas noches en vela, muchos vómitos, llantos y cambiadas de pañal y aún más baños de los que hubiese tomado alguna vez en mi vida.
Me sentía física y emocionalmente más cansada de lo que alguna vez en mi vida hubiese estado. Tenía constantes ganas de llorar, dolores de cabeza y estrés más allá de la razón, me sentía tan agotada que no encontraba nada que me quitase el enojo constante que tenía, no había forma de concentrarme o de dejar de llorar de repente.
Necesitaba descansar, Logan había tenido días muy ocupados en el trabajo, mis padres mucho estaban haciendo al cuidar a Amanda y ya estaban enloqueciendo con ella, mis amigas tenían sus propias vidas y problemas y en definitiva no encontraba nada ni nadie que me pudiese dar el apoyo necesario para cuidar al par de angelitos.
Pensé por un segundo en pedirle ayuda a los padres de Logan o a su excuñado, pero había oído que estaban teniendo problemas de salud y Thomas estaba viendo a alguien nuevo así que tampoco eran una opción.
Pero este era el día libre de Logan y le haría cuidar a los niños y pasaría mi día en cama, descansando, sin llantos, vómitos, comida que preparar o limpiar, ni la preocupación constante de no estar haciendo las cosas bien, ni la impotencia de no poder atenderlos a los dos al tiempo en cada caso.
- Melody, ¿Sabes dónde está mi camisa azul? La de cuadros blancos – preguntó Logan
- Si no sabes tú ¿por qué habría de saber yo? – pregunté con enojo
- Perdón – dijo en un tono de voz que me pareció de reproche – es solo que estás todo el tiempo en casa, así que me pareció que pudiste verla en cualquier momento
- No lo sé Logan, yo no uso tu ropa así como tú no usas la mia – respondí mirándole mal mientras amamantaba a Bryan por un lado y mecía la cuna donde dormía Briana con la otra mano
- Mira, sé que no has salido en un mes y estás cansada, te despiertas a las siete de la mañana todos los días y te acuestas a las doce, pero no es motivo para hablarme así
- Me despierto a las seis y media de la mañana, paso de largo todo el santo día hasta las doce que me dejan dormir, luego me tengo que despertar a las dos y media a darles de comer o te despertarían y no rendirías en el trabajo al día siguiente, los acuesto media hora más tarde solo para volverme a despertar a las cuatro y media o cinco y dormirles hasta las seis y media que despiertan y vuelven a dormirse por intervalos por lo que debo atender a uno mientras el otro duerme, tengo que limpiar los desastres, bañarles y cuidar que no despierten al otro porque de no hacerlo tendría una fiesta de berrinches en casa ¡Perdóname por no saber dónde está tu camisa! – prácticamente le grité, pero cuidé el tono lo suficiente para no despertar a Briana y no asustar a Bryan.
- No sabía… - comenzó a hablar pero no encontró las palabras para seguir
- ¡tú nunca sabes nada! – dije exasperada – llegas en la noche, como si yo no hiciera nada en el día y sales con la excusa de que estás cansado así que simplemente te vas a dormir y no colaboras en nada, Logan, yo puedo ser la mamá, pero no es igual cuidar a Amanda, de un año y que era solo una niña, que a estos dos de aquí, ellos necesitan más cuidado, necesitan más atención y son dos en vez de una, no tienes idea de lo que es no poder hacer nada sin pensar “espero no estarme equivocando aquí” ellos están tan apegados a mí para este momento que no sé cómo dejarles sin que lloren, no quiero a un par de hijos que no puedan ser sociables y que dependan de su mamá, quiero que si ni Dios lo quiera llego a faltar ellos puedan vivir bien y no tener que preocuparme de que no puedan valerse por sí mismos en un futuro. No me malentiendas y creas que quiero dejarles ni ninguna locura así, pero necesito el apoyo que me prometiste, no te he visto realmente desde el día en que llegaron a casa y te necesito, porque no puedo sola.
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The Secret Daddy Of My Baby (Libro#1)
RomanceMelody tendrá una bebé, ella sabe quién es el padre, pero nadie más en el mundo lo sabe, ese es su secreto, ella no tiene pareja y no, su hija no será de una simple aventura, su explicación es muy vaga y tiene a todos preguntándose por el padre de l...