I Kissed a Boy •NJ•

1

Ruidoso.

Es la única palabra en la que pudo pensar Jin en cuanto entró en aquella casa, que se desbordaba de gente por la gran fiesta que se estaba dando ahí.

Lo segundo que pudo pensar correctamente fue "Genial". Y no de una manera emocionada exactamente.

—¡Hey, Jin! Llegaste amigo, pensé que no vendrías—gritó Jungkook, uno de sus mejores amigos.

—No planeaba hacerlo, pero mi hermana vino a esta fiesta sin autorización de mis padres y me mandaron a cuidarla—explicó Jin, indignado porque no creía que su hermana mereciera la comprensión de sus padres.

—Bueno, llegaste a buena hora amigo, todo está empezando a ponerse interesante ¿sabes?

Jin se acercó aún más a Jungkook, tratando de escuchar por sobre la música de la fiesta, lo que el chico intentaba decir.

Jungkook se inclinó hacia su oído, pasando a rozar su mejilla con la propia. Acto que no le pudo importar menos.

Una chica que pasaba por ahí, tropezó un poco por la cantidad de vasos que habían en el suelo, y el que la casa estuviera a reventar de personas no ayudaba mucho a que no pasara a empujar al pelinegro.

Jin perdió el equilibrio y terminó acorralando a Jungkook contra la pared, su cuerpo completamente pegado al del chico, que en ese momento rodeó su cintura para evitar que callera.

Una voz se hizo sonar, fuerte y firme.

—Manos fuera, Kim—ordenó el chico castaño que veía la escena con cierto enojo ¿acaso eran celos?

—Tae...—siseó el de cabello rojo, soltando rápidamente al pelinegro que intentaba incorporarse correctamente.

—Fingire que no acabo de ver eso—dijo más calmado Taehyung, moviendo con su mano al pelinegro y tomando el brazo del pelirrojo, su novio.

—Tae, no pasaba nada—rió incómodamente el pelinegro—Jungkook y yo solo somos amigos, además sabes de sobra que tengo novia. Me gustan las mujeres.

—Por cierto, acabo de ver a tu hermana subir las escaleras. Demasiado ebria diría yo. Iba con una amiga, así que supongo que no tienes que preocuparte—confesó, cambiando de tema drásticamente —solo digo.

Jin agradeció internamente el gesto del chico, que aunque lo veía con cierto recelo, se sonrojo ante la sonrisa que le regaló en agradecimiento.

Pero claro, Kim Taehyung es el chico que no recibe sonrisas, por supuesto que se incomoda con un gesto tan simple.

—Amor...—susurró el pelirrojo—Tae.

—Cállate Jeon—demandó Taehyung—Lo sé.

Ambos chicos se miraron, compartiendo secretos con los ojos, que nunca le contarían a nadie. Jin envidiaba un poco la relación de su amigo, solo un poco. Apartó la vista.

—¡Hey, chicos, vengan a jugar!—llamó Jimin, al otro lado de la sala de estar donde se encontraban—¡Beer Pong!

—Paso—declaró Tae.

—Bien—empezó Jungkook—Creo que jugaré  con Jin...

—Yo no...

—Jugaré contigo, que Jin juegue con Jimin. Equipos, vamos—mandó el castaño.

—Pero yo no...

—Vamos Jin, será divertido—exclamó Jungkook, tomando a su amigo del brazo y jalandolo hasta la mesa dónde se encontraba el juego.

—¿Por qué decidiste hacer equipo?—murmuró Jungkook, antes de empezar el juego, en el oído de su novio.

Tae sonrió de lado, como lo hacía siempre que sabía de más.

—Jin es terrible en estos juegos.

Y valla que lo era.