El día del cumpleaños de Rubén lo cité en mi casa a las 8 de la noche para de ahí irnos a cenar a dónde él quisiera.
Cuando llegó a mi casa, tocó y al momento de abrir la puerta, Mangel, Fer, Cheeto, Alexby, Eva, Luzu, Lana, Staxx, Vegetta, y Willyrex salieron de sus escondites gritando sorpresa.
En el momento en que él vió todo eso sonrío, me abrazó fuertemente y besó mi mejilla una y otra, y otra vez agradeciendo su sorpresa y repitiéndome al oído ''Eres la mejor''
Inesperadamente, el timbre sonó, y miré hacía atrás asegurándome de que estuviesemos completos, y en efecto, nadie nos faltaba.
-Yo abriré.-Se ofreció Rubén.
Nunca creí que dejarlo abrir esa puerta cambiara las cosas tanto entre nosotros.
Y digo que cambió, por qué la que estaba detrás de esa puerta era Valentina, una hermosa vieja amiga que acababa de llegar de Los ángeles y buscaba quedarse una noche aquí en lo que encontraba hotel.
En el momento en el que sus ojos se cruzaron pude notar como la piel de ella se ruborizaba y como los ojos de él se dilataban súbitamente.
No duraron ni dos segundos mirándose a los ojos, cuando de repente, ambos bajaron la mirada y sonrieron de una forma extraña..
Me acerqué a ellos rápidamente y saludé a Valentina.
Me preguntó como estaba y cosas así, pero mientras le contaba todo ellos no paraban de mirarse a los ojos y sonreír cuál retrasados.
No me quedó más que presentarlos, y fue en ese momento que me di cuenta como lo fui perdiendo.
Confirmé lo que más temía cuando la fiesta terminó y mientras yo recogía todo ellos hablaban de sus gustos.
Noté como Rubén la miraba, ¿Y como no enamorarse de ella?, si tiene los ojos color miel, el cabello largo, ondulado, su sonrisa perfecta, sus hoyuelos y además es una ternura.
Pasarón los días y Rubén se separaba cada día más de mí.
Dejamos de salir y eventualmente dejamos de hablar, sólo nos veíamos cuando él iba a mi departamento para ver a Valentina, o cosas de ese tipo.
Con el tiempo su actitud fue empeorando y se volvió tan insoportable que cada que nos veíamos nos peleábamos por cosas insignificantes, pero todo empeoró en el momento en el que él y Valentina se volvieron novios, así que empaqué mis cosas y me fui a vivir con mi hermano Fernando a Bilbao, dejando Madrid, y por consecuente a Rubén y a Valentina.
790 días después, ya superado todo, decidí que era mejor mudarme de nuevo a Madrid, no al viejo departamento claro, si no a otro lugar, en donde estuviera lejos de Fernando y su novia, donde no tuviera que invadir su privacidad, donde no tuviera que ver a mi ex mejor amigo con su hermosa novia.
Conocí a Andrés, un chico que trabajaba en el mismo estudio fotógrafico que yo.
Y claro, me hizo olvidar por un tiempo a Rubén.
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790 días después (elrubiusomg).
Fanfic-Hola. -Ah, Hola... Rubén. Sus ojos no dejaban de examinar los míos, subí la ceja y mi tono de voz altanero salió. -¿Se te perdió algo?. Sus ojos se abrieron un poco, levantó la ceja y habló. -¿Algo?... ¿En tí?. Soltó una carcajada cínica. -No, no s...