Mi vida paralela

Un cuerpo diferente

Está vez está muy consciente lo que pasaba. Pero era extraño, mi cuerpo era más ligero y sentía y mis pechos se sentían diferentes e inmediatamente los toque con indiferencia a lo que pasaba. Mis manos sentían un bulto y mientras mis pechos tuvieron un reflejo alejándose de mis manos. Era muy difícil asimilar lo que pasaba y no entendía que era. Toda la habitación estaba obscura, lo único en lo que era consciente fue que no estaba en mi departamento arrendado.

Nunca había tocado los pechos de una chica, si, soy un perdedor y en ese momento seguía sin entender lo que pasaba y creo que aunque lo hubiera hecho igual hubiera tardado en entenderlo. Comencé a caminar con cierta dificultad debido a la contextura de mi cuerpo, tenía miedo prender el foco y llevarme una sorpresa, pues no sabía donde estaba . Gracias a la luz de la luna pude ver que había una puerta pequeña, como la de un baño. Con mucho cuidado abrí la puerta y di un paso sintiendo la fría baldosa de un baño, sabía que ese lugar esa seguro para saber lo estaba pasando. Inmediatamente cerré la puerta sin hacer ruido, respiré y prendí la luz.

Apenas lo hice, noté que era un baño del porte de la sala de mi departamento. El baño no era gigante pero mi sala si era pequeña. Lo primero que vi fue el inodoro y como naturalmente pasa, me entraron ganas de orinar.

Baje los pantalones que tenía y como si fuera un fantasma, sentía que mi miembro estaba ahí . Con mi mano intenté agarrarlo y al mismo tiempo deje ir la orina. Sentí algo caliente entre mis piernas y mi mano no había agarrado nada. Si, estaba mas preocupado que mi mano
no encontró nada, a que mis pantalones estaban un desastre.

Inmediatamente me bajé los pantalones y mire un triángulo de piel, es difícil de explicar pero no sabía qué diablos pasaba. Me retiré el pantalón y vi que mis piernas eran muy distintas. Podría decirse que eran las más hermosas que había visto.

Me levante un poco la playera y pude ver un abdomen que se definía con unas pronunciadas caderas. Inmediatamente me retire la playera por completo y ese bulto que sentía eran unos pechos, igualmente los más lindos que había visto. No eran muy grandes pero tampoco eran pequeños.

En ese momento no disfrutaba nada lo que miraba, todo me parecía una locura. Mi cuerpo estaba completamente desnudo mientras iba a un espejo a mirar lo que pasaba. En el espejo vi el reflejo de una hermosa chica, de esas chicas que puedes mirar por horas y no cansarte. Esas chicas que sigues en las redes sociales y si eres un fracasado como yo, de esas chicas que todos los días revisas su perfil para ver si subió una foto nueva.

Movía mis manos y hacía muecas para asimilar que estaba en el cuerpo de una mujer. No podía creer que era una chica, era una hermosa mujer y lo más extraño es que tenía mis rasgos faciales y el mismo lunar que yo tengo en el ombligo. Había mucho que digerir y no sabía por donde empezar.

- ¡Belen, despierta!. - Sonó la voz de una señora golpeando la puerta de la habitación.

Salí a ver lo que pasaba y noté que la cerradura comenzó a moverse.

- ¡Belen ! - La puerta se abría y un destello de luz me hizo despertar con un sacudón.

Había regresado a mi cuerpo y seguía haciendo guardia en aquella empresa. La piedra estaba en mis manos.