Son las tres de la mañana y sigo sin poder dormir, creo que toda esta historia, que me ha dicho mi madre me ha afectado, sin embargo tendría que hacerle caso, como siempre.
Mi madre trabaja en holdings interprises es la cordinadora jefe, y ella quiere que yo siga sus pasos asi que, quiere que me vaya a vivir con mi tia a los Angeles, pero simplemente no puedo, aquí tengo todo, novio, amigas... y si me fuera lo perdería todo. Mi nombre es Leila Tompson, conocida como: la hija de Dilayla Tompson, siempre igual todo el mundo me juzga por mi madre, quieren que siga sus pasos, pero no quiero, no me voy.
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- Leila! a desayunar- me llama mi madre- ¡voy me estoy vistiendo!-otro día al infierno llamado escuela.
-Leila llegaras tarde como no te des prisa-me dice mi madre apoyada en la bisagra de la puerta de mi habitacion.
-¡Mama porfabor dejame vestirme tranquila, no es que haya dormido muy bien ultimamente!-le conteste frunciendo el ceño.
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-Que tengas un buen día cariño, y recuerda que hoy no vengo hasta las 10, tengo una reunión importante ¿okey?
-Vale, vale , como digas.- salí del coche con un pequeño portazo.
Mi madre siempre tenía "reuniones importantes", desde que papa murio en aquel accidente, mama se comporta de manera extraña, llega tarde a casa, no tenemos conversaciones tan variadas como las de antes y ahora esto, quiere que me vaya con mi tia que ni siquiera conozco, y...
-Holaaa!-grito Elisa a mi lado, dejandome fuera de mis pensamientos. Elisa era mi mejor amiga desde que eramos pequeñas, nos lo contabamos todo y ella estuvo para mi desde lo que paso con mi padre.
-Hola!- le dedique una amplia sonrisa.
-Mira quien viene por ahi...- señalo Leila a Dylan (mi novio), que venía camindo con su sonrisa de dientes blancos.
Dylan y yo llevamos 8 meses juntos, antes de eso el era un buen amigo de la familia, su padre era el mejor amigo de mi padre.
-Hola, que tal cielo.- dijo Dylan mirandome de arriba a abajo-Veo que has estrenado lo que te regale eh- yo sonreí, me había regalado una camisa azul celeste, y unos pantalones pitillos rosa palido para mi cumpleaños.
-Si, que tal me quedan- sonreí- y yo veo que ya no me besas eh- me reí, y el se acerco y planto un pequeño beso en la comisura de mis labios.
-Obviamente te quedan perfectos, como todo lo que yo te compro-dijo Dylan con una sonrisa de superioridad y recibiendo un pequeño codazo de mi parte.
Oh dios mio, se me habia olvidado completamente lo de mi viaje... tendría que decirselo, ya que me iva en una semana.
- Oye chicos- dije llamando la atencion de Dylan y Elisa- Tengo que deciros una cosa-en ese momento sono el timbre de la primera clase, oh genial, salvados por la campana.
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Dios que largas han sido estas 6 horas, y ahora a casa, caminando como siempre, porque mi madre dice que soy muy joven para conducir, la verdad, no lo creo ya tengo 17 años y aquí es legal conducir apartir de 16...
- ¡LEILAA ESPERA!- Grito Elisa dejandome otra vez fuera de mis pensamientos, lo de esta chica era una costumbre.-dios que rápido caminas cuando quieres Lei.
-No es que yo vaya rápido, es que tu vas muy lenta- le respondi sonriente.
-Ya, seguro. Por cierto, ¿que querías contarnos esta mañana?, parecía importante- Genial, lo había olvidado, gracias Eli.
-Si es...es importante, umnnn no se como decirtelo... haber pues...
-Venga Lei no te enroyes que tengo hambre y ganas de irme a casa-dijo Elisa cortantemente.
-Pues... umnn que... me tengo que ir... a vivir en los Angeles... mi madre, dice que alli sera mejor mi educacion, y que aquí ella no puede vigilarme por su trabajo y todas esas mierdas.-Dios me ha costado mucho decirlo sin no soltar una lagrima.
-Espera, espera, espera... ¡QUE! no, no, no, tu no te vas... osea ¡que! no puedes, hablaremos con tu madre si hace falta, pero porfabor no te vayas, no.-dijo al borde de las lagrimas.
-Eli, no te preocupes, nos vamos a seguir viendo, tenemos toda esta semana para pasarla juntas...-dios mio como siga asi, la que va a llorar soy yo...-
-SOLO UNA SEMANA!! Y cuando pensabas decirmelo, casi no nos queda tiempo, y otra cosa, cuando piensas decirselo a Dylan-Ya lo ha dicho, yo se que debo decirselo, pero cortariamos, y no, no estoy preparada.
-Realmente no lo se, seguramente se lo diga esta tarde, porque hemos quedado para ir al cine. Eli, no estoy lista para esto, no puedo romper con el, no, no todavía- dije al borde de las lagrimas.
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Ya he ido al cine con Dylan, hemos visto la pelicula de Annabelle, me he asustado bastante, pero Dylan estaba alli... y apartir de ahora ya no lo estaría. Mierda tengo que decirselo, con lo bien que se estaba disfrutando de este silencio.
-Dylan, tengo que decirte algo... es... es importante.- No llores no llores no llores...
-Dime preciosa- Joder por que ha tenido que decir eso...- Lei ¿por que lloras cielo?
- Dylan para... lo que te tengo que decir es que me... mudo a los Angeles con mi tía... y tendremos que romper- ya no aguanto mas, lagrimas corrian una tras otra.
-¡QUE! no venga, dime que es una maldita broma, por que si no lo es, no...no se lo que hare... lei dime que es una broma.-sollozo tras sollozo por mi parte.
-Lo...lo siento Dylan. No hagas esto mas dificil porfavor, igualmente tenemos una semana para...-intervino Dylan cortantemente
- Como que una semana! Lei vete a la mierda enserio- dijo con los ojos llorosos.
-Dylan porfavor no hagas esto!, no te vayas!- le agarre del brazo para impedir que se fuera, pero el solto mi agarre y se fué dejandome en medio de la calle sollozando.
HOLA CHICAS:) soy nueva en hacer historias, asi que por favor si podeis, darme ideas o consejos os lo agradeceria muchisimo:.
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