Tan solo hize lo que me dijo, lo bese como si mi vida diese en ello. Porque me impacta tanto este chico, tal vez me guste...
-Lei... cielo, vamos a cenar, me encantaria quedarme aqui besandome contigo, pero mi estomago en cualquier momento va a engullirte como siga asi- dijo con una sonrisa.
-umnn... vale- le respondí con un rubor en mis mejillas.
Llegamos hasta la cocina, donde se encontraba una ensalada y un filete para cada uno.
-Dios que buena pinta tiene- le dije con hambre.
-Ya te digo- dijo riéndose.
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- Ya es tarde, debería irme a casa me lo pasé bastante bien contigo esta noche.- dije con una tenue sonrisa.
- oh, por supuesto ¿qué te parece la semana que viene?¿ el viernes te viene bien?.
- claro, cómo no... entonces hasta mañana en el instituto...- le dije despidiendome con la mano- ¡oh!, espera me tendrías que llevar a casa ya que me has traído tú, no tengo coche- le dije alegre antes de que me cerrara la puerta en la cara.
- vale, espera un segundo que coja las llaves.
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Ya eran las 3 de la mañana,seguía sin poder dormir pensando en lo que me había dicho Ashton. Seguía sin entender porque me había tratado así en el instituto y luego se comportaba tan realmente bien conmigo. La verdad, es que este chico me gustaba un poco pero me hacía sentir confusa al mismo tiempo, los parpados comenzaron a pesarme y de ahí me vista se oscureció por completo.
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-Leila, ¡es tarde levántate!, ya es el tercer día que te levantas tarde tendré que comprarte un despertador que te de calambres.- dijo mi tía en un tono amenazante.
¡Oh oh!, me había vuelto a dormir, rápidamente fui al baño y me peiné el pelo, dejándolo caer en ondas rubias. Aplique un poco de maquillaje en mi rostro, para que no se viese que no habia dormido nada y seguido me puse mis leggins negros y mi camiseta rosa palo. Salí corriendo hacia la cocina, donde allí me esperaba la sirvienta Mika con un café y un bollo.
- Buenos días princesa, ¿qué tal has dormido?- dijo en un tono amable.
- La verdad es que no muy bien, gracias por preguntar, Mika llegó tarde a clase, sólo cogeré el bollo.-dije despidiendome con la mano a la que salia corriendo hacia la puerta.
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Media hora después ya había llegado a clase una Laura y una Alba sonrientes me esperaban.
-Hola, ¿Leila qué tal estás?- preguntaron estas después de unas carcajadas producidas por el unísono de las dos.
-Muy bien, ¿y vosotras?- Dije alegremente.
- Yo bien, Calum me ha pedido que sea su novia- gritó Alba en un tono ilusionado.
-¡¿Y que le has dicho?!- gritamos nosotras en respuesta
- que me lo pensaría, pero la verdad es que le voy a decir que sí, ya mismo, ahora vuelvo- dijo Alba alejandose hacia Calum con una sonrisa.
- ¡dios mío qué emocionante!, por fin alguien que tiene novio- chillo Laura con una sonrisa radiante.
- Ya...-conteste mirando nerviosa hacia el suelo.
¿Le contaría a Laura lo que ha pasado ayer con Ash?, a lo mejor pero todavía no, no estoy lista para contárselo de momento.
¡RINGG!-vamos, ya es hora de ir a clase-dijo Laura sacandome de mis pensamientos.
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Hora del recreo, por fin, camine hasta el patio trasero donde se encontraba la Barbie y su Ken dansose besos asquerosamente asquerosos.
Y alli lo vi, Ashton con una sonrisa de infarto hablando con una chica y... ¿espera?, ¡HABLANDO CON UNA CHICA!, me acerque a el sin pensar en todas las burlas que conllevaría por parte de las plásticas, pero sencillamente, me da igual.
-Hola- le dije, apartando de mi paso, a la esbelta chica con cuerpo de modelo de pasarela y cabello negro.
-Hola, ¿que tal estas hermosa?- me contesto el, acercandose a mis labios y plantando alli un rapido beso.
-Muy...em... bien- dije con la voz temblorosa por lo ocurrido- Ashton, emmm... debemos hablar...
-Vale, espera ahora mismo voy- dijo acercandose a su amigo y susurrando algo como... te dije que la conseguiria...
Tras escuchar aquellos, me voltee sobre mis propios talones y huí de alli, dejando a Ashton con la palabra en la boca. Sin darme apenas cuenta, una lágrima cayo de mi ojo, una lagrima de dolor, no entiendo el porque de la situacion, pero me dolió. Lo que el me había dicho ayer, era mentira, una farsa, una calumnia. Ashton solo quería a las mujeres como juguetes, las utilizaba y las dejaba ir... pero oh no... conmigo no, la guerra acaba de comenzar.