𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨⁵

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Capítulo 5: Un mal día para él rey.

Capítulo 5: Un mal día para él rey

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          Hoy no me encuentro muy bien, mi mente se quiebra cuando el hombre dentro del auto me apura para bajar de una vez y suplico piedad internamente, sin ser escuchado, siendo completamente ignorado y dejado a mi suerte frente a aquel enorme edificio. Observé con demasiados sentimientos aquel enorme lugar, donde con demasiada fuerza de voluntad obligo a mis pies a ingresar y el aroma a medicamentos inunda mis fosas nasales con asco.

La rutina es la misma; me presento a la encargada, esta me da un pase y soy escoltado por uno de los guardias a una de las habitaciones especiales para visitas. Hay mucho ruido, un pasillo donde escucho los más terroríficos gritos de la gente que perdió por completo su cordura y razón, hasta su humanidad. 

La habitación a la que me ingresan no hace parecer un loco al hombre dentro de esta, pues gracias a su dinero, tiene todas las comodidades y lujos de alguien de clase alta. Si no fuera porque lo conozco esto parecería una visita normal, pero no lo es, estoy obligado por él a hacerlas y aunque me cueste aceptarlo, la sangre me vincula con él.

─ ¡Oh! ¡Mira lo grande que estás, mi pequeño hombrecito!

El guardia se puso alerta cuando él rompió toda barrera y me abrazó con amor y cariño. Este sentimiento de calidez provocó que mis ojos se inundaran de lágrimas, no pude evitarlo, lo abracé devuelta y lloré como un crío cuando comenzó a acariciar mi rostro y a dejar amorosos besos en cada lágrima que soltaba.

─Mi tierno Vinny, papá también está feliz de verte.

Cabellos azabaches, ojos intensamente rojos y algunas arrugas que marcan su adulta edad de 37 años. Mi padre, mi sangre, se encontraba mimándome como cuando era más pequeño y todo aún era perfecto.

Antes de que todo se arruine.

¿Cómo te sientes? ¿Te tratan bien aquí? ─ pregunto preocupado por su bienestar y salud. Ver de camino cómo golpeaban a uno de los pacientes me dejó algo intranquilo, pero su cálida sonrisa hizo desaparecer toda preocupación.

─Como a un rey ¡Pero no hablemos de mí! ¡El tiempo corre y necesito saber cómo te está yendo en tu nueva escuela!

Sus ánimos y buena actitud me hicieron soltar toda mi experiencia en Samezuka, los amigos que hice, lo bien que me está yendo como capitán de mi equipo y lo cómodo que me siento en ese lugar. Ignoramos la presencia del guardia de seguridad, me desconecté por un momento y bajé mi guardia, olvidando el por qué papá está encerrado ahí.

𝐄𝐥 𝐫𝐞𝐲 𝐝𝐞𝐥 𝐛𝐚𝐥𝐨𝐧𝐜𝐞𝐬𝐭𝐨 || ᴋɴʙDonde viven las historias. Descúbrelo ahora