Maratón 1/3

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Ya ha pasado más de una semana desde que Ten y yo nos reunimos, no tuve más opción que contarle a Taeri todo lo que pasó con detalles incluidos, de lo contrario no iba a dejarme en paz.

La verdad se quedó muy pensativa en cuanto le mencioné lo de su hermano y la chica con la que estaba ese día en el café. Y me puso la típica excusa de que tenía algo que hacer y se fue en ese mismo instante, no a vuelto desde ese día cosa que me extrañaba mucho.

Por otro lado mamá vino de visita y eso me ponia feliz, pero por desgracia tenía que irse ya por su trabajo solo le dieron una semana libre para venir a visitarnos, no me molestaba ya que era su trabajo y si le reclamas algo de su trabajo esa mujer se pone como fiera.

Quien me preocupaba realmente era Jung Seok, el cual seguía desaparecido y no había rastro de él por ningún lado, algo me decía que Dian sabía dónde estaba.

Pero por más que insistí no me dijo dónde se encontraba, solo que él estaba bien y que volvería pronto.

Sólo trataba de pensar cosas positivas para no alterarme y salir en búsqueda de Seok, aunque me pierda en las calles.

Pero me era casi imposible no tener miedo al saber que está allá afuera quien sabe donde exactamente y con quien.

Mamá se iba esta tarde y por más que me quedaba con Dian, no iba a ser lo mismo sin mamá y sin Jung Seok.

— ¿Cuándo regresarás? —Pregunte con poco ánimo,ya que quería que se quedara un poco más.

— No lo sé cariño, pero llamaré dos veces por semana si no estoy muy ocupada —respondió ella mientras empezaba a empacar algunas cosas.

— Oh, bueno... —dije y en ese momento se formó un silencio algo incómodo para mi.

Mamá soltó un suspiro y dejó de empacar para girar y abrazarme, al parecer ya había notado que mi ánimo no era el mejor en ese momento.

— Volveré pronto y entonces pasaremos mucho tiempo juntas, tanto que te vas a cansar de mí —dijo ella mientras me apretaba logrando que de mi saliera una pequeña sonrisa.

— Nunca podría cansarme de ti mamá, lo sabes. —mencionó riendo levemente y dejándome llevar por la calidez de su abrazo.

— Él volverá, no te preocupes. Sólo está ayudando a Dian, te aseguro que está muy bien, mejor de lo que crees. —Ella parecía muy segura de sus palabras, mientras acariciaba mi cabeza causando que cerrará los ojos como acto de reflejo— Y creo que tu debería salir un poco con Tae Ri, para despejar tu mente.

— Tae Ri no a vuelto desde hace una semana. —digo mientras me aferraba a ella sin querer soltarla por las relajantes caricias que me daba.

— Entonces puedes salir con Ten. —en ese momento mis ojos se abrieron con sorpresa.

¿Cómo sabía ella que él estaba aquí? Me separe un poco de ella y la mire con notable sorpresa en el rostro.

Ella sólo ríe un poco y continuó con lo que hacía antes con una sonrisa en el rostro, no despegué mi mirada de ella ya que esperaba que me dijera como sabía que Ten estaba en Seúl.

— Me lo encontré hace cuatro días mientras hacía las compras —respondió ella como si no fuera nada— además de que me contó que arreglaron las cosas hace poco.

Bueno si lo pensaba bien no era mala idea salir con Ten, lo había perdonado si pero no me sentía con la confianza como para pedirle que salgamos a algún lado nuevamente como antes, no lo se después de todas las veces que me canceló ya no tenía la misma confianza para pedirle que salieramos a divertirnos.

— No lo sé... —Murmuré más para mi misma que para ella— Agh, ¿Por qué no? Creo que sería buena idea, no pierdo nada con intentar.

Ella solo sonrió ante mis palabras y cerró su maleta, la cual ya estaba completamente lista.

Ya era hora que se fuera y como siempre logro animarme antes de lo esperado.



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No Somos Amigos - ChittaphonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora